31 agosto 2007

Energías limpias, pero no a cualquier precio


Las energías renovables también pueden tener consecuencias ambientales y sociales negativas si se implantan sin una planificación previa

La extensión de las energías renovables no garantiza por sí misma una mejora del medio ambiente. Fuentes alternativas, como los biocombustibles, la eólica o la solar, pueden acarrear problemas si se implantan sin una evaluación previa de su impacto y sin establecer políticas de ahorro reales. La cuestión no es renunciar a ellas sino planificar bien su uso para que los impactos negativos no superen las ventajas. Son los pies de barro de las energías limpias.
Un informe reciente de las Naciones Unidas (ONU) alerta sobre las consecuencias negativas que pueden darse si la sociedad se lanza a desarrollar una industria del biocombustible de forma acelerada. Si se destinan grandes cultivos a la producción de biocarburantes en lugar de alimentos, dice el informe, se puede producir un desequilibrio en el abastecimiento alimentario mundial y un aumento de la deforestación, dada la gran extensión de terreno que se necesitará para obtener biocarburante.

Biocarburantes o alimentos
La necesidad de extender el uso de los biocombustibles para mitigar las emisiones de CO2 ya ha tenido los primeros efectos colaterales. Los biocombustibles, obtenidos de cultivos como la soja, el maíz, la colza, el girasol o la caña de azúcar, han disparado los precios de los alimentos un 10% el pasado año y hasta un 40% en el caso de los cereales. La crisis desatada en Méjico hace unos meses por el encarecimiento de las tortillas de maíz (un alimento básico de la población) es consecuencia de que gran parte de la cosecha de maíz de Méjico y de los Estados Unidos se ha desviado del mercado alimentario al de los biocombustibles, disparándose así los precios del maíz. La situación, que llevó a miles de personas a las calles y desató una crisis política, podría ser sólo el principio de una cadena.
Según un informe del Worldwatch Institute (El estado del mundo 2006), China podría enfrentarse a una situación similar. Su Gobierno, que quiere reducir el gasto en petróleo, desea cubrir el 10% de las necesidades energéticas del país con energías renovables en 2020. Para ello incrementará la producción de etanol a partir del maíz hasta 14 millones de litros, cantidad equivalente a la de Brasil o Estados Unidos. El problema es que podría no disponer de suficiente materia prima porque las grandes reservas de cereales del país se han reducido en los últimos años. Si el Gobierno chino insiste en seguir aumentando la producción de biocombustible, podría verse en la necesidad de importar los cereales para alimentar a su población de 1.300 millones de habitantes y a los animales de sus granjas.

Riesgo de deforestación
Ante esta dificultad, la solución no pasa por aumentar de forma descontrolada la superficie cultivable porque, como advierte otro informe de la ONU, surge entonces el riesgo de la deforestación. Este documento no se opone a los biocarburantes, sino que defiende una implantación que garantice un uso sostenible y aceptable de las tierras. De lo contrario, el daño social y ambiental de los biocombustibles puede superar a sus beneficios.
Los primeros efectos perniciosos son ya una realidad. En Brasil, uno de los mayores productores de bioetanol a partir de la caña de azúcar, los cultivos energéticos están arrebatando tierras hasta ahora destinadas otros usos. De forma similar, en el sudeste asiático, los cultivos de palma para producir biocarburante están destruyendo los bosques tropicales. En Europa, expertos británicos han calculado que conseguir biocombustible para sólo el 20% de los automóviles del Reino Unido supondría tener que dedicar casi todas las tierras de cultivo del país. Si esto se extiende a nivel mundial, las consecuencias serían catastróficas. Hay alternativas, como obtener biocombustible de aceites usados (como el de cocinar) o de otras fuentes de biomasa (como fitoplancton marino), que aún deben ser mejoradas.

Impacto en aves y vientos
Los impactos asociados a las energías renovables no cesan aquí. Dos de ellos se hallan muy vinculados a la energía eólica: el impacto paisajístico y el daño causado a las aves. La ubicación de los parques eólicos, en zonas de fuertes vientos y crestas de montañas, fácilmente pueden coincidir por zonas de paso de aves. Una vez que éstas pasan entre los molinos, el movimiento de las aspas succiona a las aves y acaba seccionando sus alas. En España, el Grupo de Estudio y Protección de las Aves Rapaces (GER) ha denunciado que se están instando parques eólicos en las rutas de buitres leonados. Por otro lado, asociaciones ecologistas han pedido al Gobierno español una moratoria en la concesión de autorizaciones hasta que se defina una relación de zonas de interés ambiental y paisajístico incompatibles con los parques eólicos para evitar la instalación de aerogeneradores en espacios naturales de interés y habitados por especies en peligro, como el águila real o el buitre.
Otro riesgo que no ha sido evaluado todavía es el posible impacto de estas energías sobre los propios vientos y el clima. Se ha calculado que las aspas de los molinos de viento no pueden captar más del 49% de la energía del viento que pasa a través de ellas. Un trabajo del foro Crisis Energética ha calculado que si se quisiera obtener a través de parques eólicos la mitad de la energía eléctrica que hoy se consume a nivel mundial, esto supondría la construcción de instalaciones para interceptar todos los vientos sobre continentes a menos de 100 metros de altura, lo que podría ocasionar daños irreversibles en el comportamiento de los vientos estacionales, en las corrientes marinas que se interrelacionan con las corrientes de aire y en las especies que dependen de ambas.
Algo similar sucede en el caso de la energía solar. El informe calcula que para sustituir la electricidad que se gasta actualmente se necesita tener extensiones amplísimas cubiertas de placas solares, lo que podría suponer cambios climáticos a nivel local, sin contar con el inconveniente de la energía necesaria que se requiere previamente para fabricar todas esas placas solares, los equipos auxiliares y su transporte.
El informe reconoce que el planteamiento de estas cifras y situaciones hipotéticas no es más que un ejercicio de órdenes de magnitud para demostrar que no basta con sustituir las energías fósiles con una o varias renovables, sino que es necesario cambiar el sistema actual basado en el crecimiento infinito, en el aumento constante del consumo y del gasto energético.


CONSUMER EROSKI - la revista del consumidor de hoy - septiembre 2007

30 agosto 2007

El mar subirá 59 cm este siglo incluso si no se funden los polos, según la ONU

Su último informe eleva del 66 al 90% la responsabilidad del hombre en el cambio climático.
A.Doyle
viena- El cambio climático es ya «inequívoco» en todo el planeta, de acuerdo con las últimas observaciones sobre el derretimiento generalizado del hielo y el aumento de las temperaturas y del nivel medio del mar. Ésta es la principal conclusión del cuarto informe del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático de la ONU (IPCC), cuya publicación está prevista para la próxima cumbre mundial del organismo, a celebrar en Valencia el 17 de noviembre, informa Reuters. El texto -en el que han participado 2.500 científicos de 130 países- achaca el fenómeno a la emisión de gases por parte del hombre en un 90 por ciento, cuando el anterior informe del IPCC que hacía referencia a este aspecto sólo alcanzaba un 66 por cien de «culpabilidad» humana. Todavía se está «a tiempo» Sin embargo, los gobiernos «están a tiempo» de ralentizar la escalada de emisiones y reducir su impacto dañino sobre la Tierra «si actúan rápido». Para ello, el informe recomienda implementar políticas de ahorro energético, extender el uso de fuentes renovables, agilizar el mercado de emisiones y promover el enterramiento de CO2 en las centrales eléctricas de carbón para evitar que llegue a la atmósfera. El impacto económico del cambio climático es uno de los aspectos que más preocupan. Según el trabajo, el coste de estas iniciativas sería «manejable» para la economía mundial, cuyo PIB se reduciría hasta un 3 por ciento en 2030 si se adoptan todas las medidas propuestas para estabilizar las emisiones antes de 15 años. De no hacerlo, algunas previsiones hablan de un 30 por ciento de pérdidas. El borrador preliminar del informe, que circula por la Conferencia sobre Cambio Climático de la ONU que se celebra estos días en la capital austriaca, alerta sobre la posibilidad de que el nivel del mar siga subiendo durante los próximos siglos entre 40 y 370 centímetros, y entre 18 y 59 antes del año 2100, siempre y cuando el casquete polar ártico y las capas de hielo que cubren la Antártida y Groenlandia no se derritan, en cuyo caso el aumento se mediría en decenas o centenares de metros. El nivel del agua crecerá «por muchos siglos», incluso si se detuvieran inmediatamente las emisiones, porque las aguas profundas absorberán lentamente el calor de las superficiales, expandiendo el volumen de los océanos por el efecto térmico. En cuanto a la atmósfera, el cuarto informe del IPCC confirma que, en «escenarios favorables», las temperaturas se elevarán entre 1,8 y 4 grados centígrados este siglo. EE UU, criticado por no firmar el Protocolo de Kioto, manifiesta ahora estar «profundamente comprometido» con el medio ambiente, después de recibir duras críticas por parte de la Unión Europea. El Protocolo compromete a los firmantes a reducir sus emisiones de 1990 un 5 por ciento antes de cinco años, objetivo que muy pocos países podrán cumplir.


La Razón, Jueves 30 de agosto de 2007

Las petroleras subirán los precios con la mezcla de biocombustibles

Su alto coste de producción encarecerá la gasolina y el gasóleo a partir de 2010

I.ANASAGASTI
Los operadores petrolíferos tendrán que aumentar los precios de los combustibles, una vez entre en vigor la orden ministerial que obliga a mezclar con las gasolinas y los gasóleos un 5,83% (en valor energético por litro) de biocombustibles en 2010.
Esta propuesta, más ambiciosa que la directiva europea que fija de manera indicativa un 5,75% fue enviada por el Ministerio de Industria a la Comisión Nacional de Energía el pasado 17 de julio para que se pronunciase acerca de su viabilidad.
A pesar de que los biocarburantes tienen tipo impositivo cero, esto no garantiza que el producto obtenido de la mezcla con combustibles fósiles sea más barato. Lo que sí supone, en cambio, es un margen amplio, pero no suficiente, para los productores de cara a mitigar el coste más elevado de su fabricación.
Producir biocombustibles es más caro, fundamentalmente, por el coste de las materias primas (80% de la producción). En elcaso del biodiésel , las semillas de plantas oleaginosas (colza, soja, palma) y en el bioetanol, cereales, remolacha azucarera, caña de azúcar, entre otros.
Su precio, según afirma José Antonio Bueno Oliveros, autor de un estudio de la Fundación Alternativas sobre las energías en la automoción, es volátil al depender de las lluvias, lo que supone añadir un grado de incertidumbre en el proceso productivo. Además, un desarrollo desequilibrado de los cultivos energéticos puede afectar seriamente al mercado alimentario, desencadenando fuertes variaciones en los precios de aquellos alimentos empleados en la producción de biocomponentes. En Méjico,por ejemplo, en menos de un mes el maíz pasó de pagarse a 0,53 € el kilo a 0,88 €, debido a la demanda norteamericana para producir etano.
Otros factores que incrementarán el valor de los carburantes son el elevado coste de adaptación de la distribución y la reconversión que tendrán que hacer los operadores petrolíferos de todas sus estaciones de servicio. “Esta inversión repercutirá finalmente en el consumidor. No tenemos márgenes para financiar esto”, declara Álvaro Mazarrasa, director general de la Asociación de Operadores de Productos Petrolíferos. (AOP).
La solución a la mayoría de estos problemas, por lo menos el que se refiere al precio de las materias primas, se alcanzará en el momento en que lleguen a buen puerto las investigaciones que se están desarrollando actualmente y que van dirigidas a la obtención de biocarburantes a partir de residuos forestales o desechos agrícolas.
Apuesta gubernamental
El Gobierno con este proyecto de obligatorio cumplimiento, cuando la normativa europea establece una cifra sólo de manera indicativa, pone un grando de arena importante en su lucha por reducir las emisiones de efecto invernadero, puesto que en España cerca del 40% del consumo energético final corresponde al transporte y el 99% del mismo se cubre con derivados del petróleo.


LA GACETA DEL LUNES, 27 DE AGOSTO DE 2007

28 agosto 2007

DiCaprio se pone ecologista

El actor presenta y produce “La undécima hora”, un documental sobre el cambio climático recién estrenado en EEUU y que no sigue la senda apocalíptica del filme de Al Gore.
El desierto avanza, los glaciares se desangran y el calor amenaza con destruirlo todo. Al Gore ganó un oscar y se hizo oír en todo el planeta. Ahora llega Leonardo DiCaprio con una visión mucho más constructiva y optimista.
CARLOS FRESNEDA
De las colinas de Hollywood a las cloacas de Los Angeles ... Leonardo DiCaprio ha decidido pisar el fango e implicarse hasta el tuétano en “La undécima hora”, el documental que camina sobre la estela draconiana de la verdad incómoda de Al Gore, pero con un optimista giro final: nos queda tiempo – aunque no mucho – para imprimir el giro necesario y evitar el desastre ecológico.
“No se trata de salvar la Tierra, porque el planeta es perfectamente capaz de seguir adelante sin nuestra especie”, advierte en los prolegómenos Kenny Ausubel, fundador de los Bioneers, asesor e inspirador de DiCaprio en este viaje al futuro posible. “La pregunta es, ¿seremos capaces de sobrevivir nosotros?”.
David Suzuki, biólogo canadiense, nos recuerda como el 99% de las especies que habitaron el planeta se han extinguido, y cómo el hombre está pisando el acelerador de la desaparición masiva de los hábitats. El científico Stephen Hawking, con la voz entre profética y robótica que emite su ordenador nos advierte: “Al ritmo actual de destrucción, la Tierra podría acabar siendo un planeta baldío e inhabitable. Igual que Venus”.
Como contrapunto, las palabras del ex director de la CIA, James Woolsey, convidado de piedra entre la amalgama de científicos y expertos, recuerda la vieja cita de Churchil sobre la fe en el futuro: “Los americanos acaban haciendo lo que hay que hacer; desafortunadamente, lo hacen siempre después de agotar las otras opciones”.
La indolencia de sus compatriotas, los mayores consumidores y contaminantes del planeta, fue precisamente el acicate que impulsó a Leonardo DiCaprio a lanzarse como productor y presentador de “La undécima hora”. “El cambio climático es un hecho probado”, asevera DiCaprio. “Y tengo la esperanza de que EEUU responderá y servirá de ejemplo al resto del planeta”.
Más que un rostro atractivo, intercalado entre los bustos parlantes y el río desbordante de imágenes del planeta, Leonardo es el hilo conductor. “Le consideramos un co - creador”, aseguran las hermanas Nadia Conners y Leila Conners – Petersen, directoras de la película.
El puente entre unos y otros ha sido Kenny Ausubel, el fundador de los Bioneers, el grupo – paraguas de ecologistas, científicos y pensadores reunidos bajo el lema "Restaurar la Tierra". Leonardo - y su madre - asistieron hace dos años al cónclave de los Bioneros en San Rafael (California), y ahí brotó la idea que con el tiempo acabaría alumbrando "Laúndécima hora".
Pese a la severidad del título - la hora "undécima" es "la última oportunidad" - la película no llega a teñir la gran pantalla del negro apocalíptico de "Una verdad incómoda". El último tercio del metraje se dedica precisamente a explorar el pensamiento científico, las energías renovables, el diseño urbano y las sociedades humanas para responder a la gran pregunta de fondo: "¿Tiene la Naturaleza todas las respuestas que necesitamos para restaurar los recursos, proteger nuestra atmósfera y asegurar nuestra pervivencia en el planeta?".
"Lo primero que tiene que cambiar tal vez es nuestra lógica interna", recalca Leila Conners - Petersen. Nadia Conners apela a la necesidad de un movimiento social, equiparable al de los derechos civiles de los años 60, "para reclamar el bien común y el control de nuestras vidas que hoy por hoy ejercen las grandes corporaciones".
Las directoras han querido dar continuidad al mensaje con una página web, http://www.11thhouraction.com/, que aspira a ser una llamada a la acción directa, con experiencias y soluciones de todos los rincones del mundo, para hacer frente al reto del cambio climático.
Leonardo DiCaprio se remonta a la raíz del problema - "la disociación entre el hombre y la Naturaleza que se produce en la Revolución Industrial" - y el incombustible Jerry Mander, una de las voces más críticas contra la globalización, recrea de esta manera el modo en que vivimos: "Parecemos robots, viviendo a expensas de las máquinas y con la ilusión de que no necesitamos la Naturaleza para sobrevivir". Lester Brown, autor de "La eco - economía", nos ofrece una posible solución: "Bajemos los impuestos sobre la renta y subamos al mismo tiempo los impuestos por las emisiones de CO2...Quien contamina, tiene que pagar".
"Uno puede ver desde el espacio como la raza humana ha alterado la faz de la Tierra", advierte Stephen Hawking. "La evidencia de que la explotación del planeta está llegando a un límite crítico, pero las demandas humanas crecen y crecen".
"Tenemos que reimaginar hasta el último aspecto de nuestras vidas", advierte el pensador y ex empresario Paul Hawken, coautor de "El Capital Natural". "Unos lo considerarán como un peso enorme, pero otros preferimos verlo como un reto: esta generación tiene la responsabilidad de cambiar el mundo".
La premio Nobel Wangari Maathai nos recuerda el valor incalculable de los árboles, y el arquitecto William McDonough, autor de "Cradle to Cradle", insiste en cómo los edificios del futuro tendrán que ser como nuestros queridos parientes vegetales: modelos autosuficientes de aprovechamiento de la energía, sin desperdiciar una gota de agua ni generar un solo desecho.
"¿A qué se parecerá el futuro?", se pregunta DiCaprio. "¿Será nuestra generación capaz de crear un mundo sostenible a tiempo? ¿Quién guiará este cambio masivo?".


EL MUNDO / UVE / DOMINGO 19 DE AGOSTO DE 2007

Al sol que más calienta

Cada vez son más los pequeños inversores que deciden apostar por el medio ambiente y ponen sus ahorros a producir energía eléctrica a partir del sol. Una opción limpia y con alta rentabilidad asegurada.

POR PILAR QUIJADA
“Cultivar” energía respetuosa con el medio ambiente por medio de grandes “plantas” artificiales fabricadas con células de silicio es una opción en alza. Como inmensos girasoles metálicos, los paneles solares empiezan a verse en nuestro paisaje como emblema de las energías renovables, siguiendo la estela de la eólica, hasta ahora una de las bazas más importantes – en 2006 alcanzó una potencia instalada de 11.738 megavatios.
Sólo se necesita sol – que no nos falta – y la última tecnología en placas fotovoltaicas para producir energía eléctrica capaz de abastecer a nuestros hogares. En Alemania ya hay edificios construidos para aprovechar la energía solar y autoabastecerse de electricidad. Y es que el país germano, a pesar de contar con menos horas de sol que el nuestro, ha sabido sacarlas mejor partido y se ha puesto a la cabeza en energía fotovoltaica. Ya tiene instalados más de 3.000 megavatios (Mw), una cifra que supera con creces los 133 Mw con que a finales de 2006 contaba España.
A pesar de ello las plantas de producción de energía fotovoltaica están experimentando un auge exponencial, según datos de la Comisión Nacional de la Energía, “debido fundamentalmente a la retribución muy favorable de estas instalaciones y a la simplificación de las condiciones de conexión a la red”. De acuerdo con el Plan de Energías Renovables, el objetivo es que España llegue a los 400 Mw de aquí al año 2010 para contribuir a la reducción de los niveles de CO2 como exige Kioto. Un tope que se ha quedado corto y se prevé que se alcanzará en 2008.
A este auge ha contribuido la idea de huerta solar impulsada por la empresa Acciona Solar, que ha registrado la marca. Consiste en la agrupación en un mismo recinto en régimen de multipropiedad de pequeñas instalaciones fotovoltaicas que permiten a pequeños inversores participar en la producción de energía limpia.
En lista de espera
Una iniciativa que se puso en marcha en 2002 en Navarra y que ha tenido excelentes resultados. Tanto que Acciona tiene abierta lista de espera. De momento, según informan fuentes de la compañía, lleva instalados 23 Mw, que pertenecen a dos mil personas o pequeñas empresas convertidos en productores de energía solar.
Su planta emblemática es desde marzo pasado la de Monte Alto, en Milagro (Navarra), la tercera del mundo en potencia instalada (9,5 Mw) y la primera en producción debido a las condiciones de sol favorables de nuestro país. Agrupa un total de 753 propietarios que han invertido en conjunto 65 millones de euros. Además de los beneficios a los inversores, esta huerta solar se estima que generará anualmente una electricidad equivalente al consumo de cinco millones de hogares – 14 millones de kilovatios hora – y evitará la emisión a la atmósfera de unas 13.500 toneladas anuales de CO2.
Y es que como explica Javier Antama, presidente de ASIF (Asociación de la Industria Fotovoltaica), “muchas personas quieren contribuir al desarrollo de la energía solar fotovoltaica y les gustaría tener una instalación en su casa pero por diversas razones no pueden: porque el resto de los vecinos de la comunidad de propietarios no está de acuerdo, porque no hay espacio, porque el tejado no reúne las condiciones de luz necesarias o simplemente porque prefieren evitar los papeleos y optan por adquirir una parte de un parque solar y que otros los administren y mantengan”. Los encargados de la administración y mantenimientos son empresas promotoras. Gustavo Carrero, consejero de OPDE explica que cuando un particular o una empresa compra un activo de un parque solar se convierte en un pequeño productor de energía renovable y “se da de alta la instalación a su nombre en el registro de Industria de Energías Renovables. Además, firma un contrato con una de las tres compañías eléctricas – Iberdrola, Endesa o Unión FENOSA – que tienen la obligación por ley de comprarle la energía y pagarla a un precio marcado en el RD 661/2007”. La garantía estatal de que dichas tarifas se van a mantener durante un largo período de tiempo es la basa de que muchas instalaciones se estén efectuando como inversiones a largo plazo por parte de empresas y particulares. El rendimiento económico está entre el 8 y el 10 por ciento. Además del papeleo, la promotora se encarga del mantenimiento y seguridad de la planta.
Rentabilidad asegurada
El tiempo en que se amortiza la inversión depende de la zona donde esté ubicada y las características de la instalación, aclara Carrero: “en una instalación con seguidor solar – un dispositivo que permite que los rayos solares incidan perpendicularmente a las placas a lo largo del día y del año – el capital se amortiza en unos 8 años. Las instalaciones con seguidor solar son un 12 por ciento más caras respecto a las fijas, pero incrementan los ingresos en un 35 por ciento”. Las zonas más productivas, aclara, no son necesariamente las situadas más al sur: “El silicio no funciona bien con el exceso de calor. Al instalar una planta fotovoltaica no sólo se mira la radiación solar, sino que sea una zona ventilada, con aire fresco. De lo contrario la producción en los meses de verano baja”.
Prácticamente en todas las comunidades se están instalando granjas solares. Muchas ofrecen ayudas a los inversores en forma de créditos o reducciones fiscales. Y el tipo de suelo que ponen a su disposición varía de unas a otras. Una de las más restrictivas es la Comunidad de Madrid, señala el presidente de ASIF, que únicamente permite la instalación de parques solares en terreno urbanizable.
No todo son ventajas. En la Comunidad de Madrid, en Cenicientos, hay un ejemplo – aunque sea un caso aislado, como asegura el presidente de ASIF -. Alejandro García Dávila, señala que tiene en funcionamiento desde el año 2001 tres huertas solares, de 50, 120 y 400 Kw, respectivamente. Todos están produciendo ya energía eléctrica que se vierte a la red. Sin embargo, 12 de los inversores no están recibiendo beneficios por sus 180 Kw. Una falta de coordinación entre las Consejerías de Industria y Medio Ambiente se lo impiden. Paradójicamente, asegura, las instalaciones han sido subvencionadas por la Comunidad de Madrid.
Los ecologistas opinan
El portavoz de Greenpeace, Miguel Soto, explica que: “Como impulsores del Proyecto 100 % renovables, consideramos los huertos solares como una herramienta fundamental. Una muy buena solución en zonas donde pueden hacerse pequeñas minicentrales. Además se convierte suelo agrícola, excedente en Europa, en centrales solares y se cumplen con los objetivos de Kioto de reducir emisiones de CO2”. Heikki Willstedt, experto en energía y cambio climático de WWF/Adena, señala que aunque exista la percepción de que el tipo de primas que se otorga a estas iniciativas encarece los costes de electricidad, no hay que olvidar que disminuye la importación de combustibles fósiles y tiene ventajas medioambientales. Ambos resaltan que el tope establecido en 400 Mw es insuficiente. Javier Antama, presidente de ASIF, señala que, en 2005, cuando se redacta el Plan de Energías Renovables, se contaba con 5 – 10 Mw: “Pasar a los 400 Mw era todo un reto. Ahora se han quedado pequeños y estamos en conversaciones con el Ministerio”.

ABC 19_8_2007

03 agosto 2007

La Revolución de los Biocombustibles

Las discusiones durante la última Cumbre del G-8 + 5, en Heiligendamm, dejaron en claro que asuntos como el cambio climático, el crecimiento sostenible, fuentes nuevas y renovables de energía y financiación para el desarrollo son temas mundiales sobre los cuales los países del Sur deben ser oídos. Al final de cuentas, nuestras poblaciones son directamente afectadas por esos múltiples desafíos. Más aún, en nuestros países surgen propuestas innovadoras y creativas para enfrentarlos. El aporte de los líderes de Sudáfrica, Brasil, China, India y México durante la Cumbre ampliada del G-8 refuerza la importancia de profundizar en un verdadero diálogo Sur-Norte.
África tiene un papel central en este debate. El continente está pasando por profundas transformaciones que sientan las bases para un nuevo ciclo de estabilidad política y dinamismo económico. Son 53 países, vastos recursos naturales y una población joven que aspira a realizar todo su potencial de desarrollo y prosperidad. Esa África, que visité cinco veces durante mi primer mandato y que continuaré visitando, está reforzando sus vínculos comerciales y políticos con Brasil.
En la Cumbre África-América del Sur, en 2005, y en las dos ediciones del Foro Brasil-África, exploramos las múltiples potencialidades de esta asociación. Los biocombustibles pueden dar una calidad superior a esa alianza.
Brasil tiene una experiencia exitosa ( de más de treinta años) en la producción de carburantes que combinan la seguridad energética con amplios beneficios económicos, sociales y ambientales. La mezcla de 25% de etanol en la gasolina y la utilización de alcohol puro en automóviles “flex-fuel” permitió reducir un 40% el consumo y las importaciones de combustibles fósiles: Dejamos de emitir, desde 2003, más de 120 millones de toneladas de gas carbónico, ayudando a combatir el recalentamiento mundial.
Pero el potencial de las biomasas trasciende la generación de energía limpia y renovable. La industria del etanol creó directamente , millones e indirectamente 4,5 millones de puestos de trabajo en Brasil. El programa de biodiesel, en su fase inicial, ya brinda empleo a más de 250 mil personas, sobre todo a pequeños agricultores de zonas semiáridas, generando ingresos y colaborando para fijar la población a la tierra. Los biocombustibles también ayudan a combatir el hambre, aportando ingresos que permiten a las poblaciones pobres adquirir alimentos. Su producción no amenaza la seguridad alimentaria, ya que afecta al 2% de nuestras tierras agrícolas.
Esos programas desalientan las migraciones desordenadas, reducen la saturación de las grandes ciudades y la marginación urbana, así como la presión de los pequeños mineros y los agricultores para arrasar con los bosques autóctonos. Además, la expansión de la caña contribuyó a recuperar zonas de pasturas degradadas, de bajo o nulo potencial agrícola.
Por todas esas razones, los biocombustibles tienen una relevancia especial para los países en desarrollo. Dado su enorme potencial de creación de empleos y de ingresos, ofrecen una verdadera opción de crecimiento sostenible, especialmente para los países que dependen de la exportación de escasos bienes primarios. Al mismo tiempo el etanos y el biodiesel abren nuevas avenidas de desarrollo, sobre todo en las industrias bioquímicas. Son alternativas económicas, sociales y tecnológicas para países pobres económicamente, pero ricos en sol y en tierras de labranza.
Estoy convencido de que los biocombustibles deben estar en el centro de una estrategia planetaria de preservación del medio ambiente. Los acuerdos como el firmado por Brasil y Estados Unidos, y en negociación con países europeos, prevén la instalación de proyectos triangulares, en América Central, el Caribe y África, capaces de unir la tecnología brasileña con las condiciones climáticas y suelos favorables en esas regiones. El Gobierno y el empresariado brasileños ya ofrecen cooperación técnica bilateral en la producción de alcohol y biodiesel en Mozambique, donde un programa de biocombustibles asocia el conocimiento brasileño con la financiación británica. Podemos repetir esa iniciativa en toda África subsahariana.
Los biocombustibles pueden ayudar a un mundo que carece de soluciones para la degradación ambiental y el encarecimiento de la energía. Ofrecen esperanza a los países pobres al combinar crecimiento económico, inclusión social y conservación ambiental. Un valioso aliado, por lo tanto, en el combate a la inestabilidad social y política, a la violencia y la migración desordenada.
Entretanto, esa revolución solo ocurrirá si los países ricos abren sus mercados a los más pobres, eliminando subsidios agrícolas y barreras a la importación de los biocombustibles.
Todos ganarán. Los países en desarrollo generarán puestos de trabajo para las poblaciones marginadas y divisas para dinamizar sus economías. Los países desarrollados podrán acceder a fuentes de energía limpias a precios competitivos, en lugar de invertir en costosas innovaciones para que los combustibles convencionales sean menos contaminantes.
La creación de un riguroso sistema de certificación pública en materia de biocombustibles, reafirmado por acuerdos multilaterales y el compromiso de la opinión pública, ayudará a preservar el medio ambiente y garantizará condiciones dignas de trabajo. Los biocombustibles ofrecen una alternativa para ayudar a la humanidad a prosperar como un todo, sin dejar a nadie atrás ni hipotecar el futuro de las nuevas generaciones. Ese es el mensaje que llevaré en 2008 a la Conferencia Mundial sobre Biocombustibles, que Brasil está organizando.

LUIZ INÁCIO LULA DA SILVA
Presidente de la Repúblcia Federal de Brasil
ABC SABADO 14 _ 7 - 2007

Las marcas acusan a Bruselas de pasividad respecto a la tecnología del hidrógeno

Las emisiones contaminantes preocupan en Bruselas, en particular las que generan el transporte por carretera pese a que no son, ni de lejos, las más importantes. Se han formado grupos de trabajo pero, incluso antes de que hayan podido publicar el resultado de su dedicación, se han aprobado ya leyes restrictivas que entraran en vigor progresivamente en fechas que han sido ya concretadas.
Uno de estos grupos de trabajo formado por miembros de la Administración y representantes de los constructores de automóviles, estudian un proyecto sobre lo que denominan la "Sociedad del Hidrógeno". Propone una nueva forma de vida en la que buena parte de la energía que se consuma deberá provenir de este gas y deberá haberse implantado por completo en el año 2050.
El problema es que en este largo recorrido se han previsto etapas intermedias que necesariamente deberán alcanzarse. Pero de momento las cosas no marchan por el buen camino.
Por ejemplo, en 2020 las ventas anuales, en Europa, de coches porpulsados por hidrógeno, tendrían que estar entre 400.000 unidades y 1.800.000, un volumen difícil de alcanzar si no se toman medidas concretas de forma inminente. En estos momentos, según cálculos del presidente dela empresa alemana Linde, Wolfgang Rietzle, se calcula que hay unos 500 vehículos en el mundo capaces de funcionar con hidrógeno pero apenas un 10% están en Europa.

Retraso europeo
Según Thomas Brachmann, responsable técnico del centro de Investigación y Desarrollo de Honda en Europa "todos estamos de acuerdo a la hora de fijar cifras técnicas, pero nadie se está moviendo para que esos números lleguen a ser una realidad. Mientras que en países como Japón o Estados Unidos ya hay proyectos piloto en zonas determinadas donde los automóviles movidos por hidrógeno pueden funcionar, en nuestro continente apenas hay algunas estaciones de servicio aisladas en cuatro o cinco países y ninguna política oficial".
El directivo de la marca japonesa hacía estas declaraciones en el marco de la presentación del último prototipo de Honda, el FCX Concept, un vehículo que utiliza una de las más avanzadas tecnologías de pila de combustible, un dispositivo mediante el cual el hidrógeno en contacto con el oxígeno del aire reacciona para formar agua generando energía eléctrica. Este sistema no es nuevo ni único, pero se presenta como la mejor solución al problema de los motores limpios para el automóvil. Poco a poco se van resolviendo sus inconvenientes, como la escasa autonomía o el peso y volumen de la pila de combustible, las baterías o los depósitos para el gas.
En el caso de la firma nipona, los primeros coches de este tipo que lanzaron en 1999 podían recorrer apenas 200 kilómetros y sólo la célula pesaba más de 200 kilos, mientras que en el FXC esas cifras han pasado a ser de 570 kilómetros y 67 kilogramos respectivamente.
Los materiales que se utilizan en el interior de nuevo Honda también provienen de fuentes naturales y su proceso de transformación y posterior reciclaje garantizan la sostenibilidad medioambiental. Además, el FCX cuenta con un diseño futurista y muy elegante, tanto en el interior como en el exterior. La cifra de 130 caballos de potencia dice poco sobre la capacidad de aceleración de sus motores eléctricos.
Con escasos cambiso en relación a este prototipo, Honda pondrá a la venta el FCX en 2008 en Japón y en el estado norteamericano de California. En Europa, Noruega y Suecia están a la cabeza en este terreno, y de manera especial en la isla de Gotland, donde se han llevado a cabo las pruebas de FCX. En esta pequeña isla del mar Báltico, las autoridades se han comprometido a producir la suficiente energía proveniente de fuentes renovables para atender el 100% de sus necesidades en 2025.
Por otra parte, Honda paralelamente al coche de pila de combustible, también ha desarrollado una estación de energía doméstica autónoma que, a través de paneles solares, produce hidrógeno para recargar el automóvil y sirve también como fuente energética alternativa con la que abastecer de electricidad la vivienda. En Europa, hay iniciativas privadas que trabajan en la obtención de hidrógeno de la biomasa para evitar, con gran visión de futuro, el sacarlo a partir del gas natural que no deja de ser un combustible fósil y que no termina con la dependencia energética respecto a ciertos países que se pretende evitar.
JAIME HERNÁNDEZ
EL MUNDO, VIERNES 3 DE AGOSTO DE 2007

La ONU gastará 6.000 millones en convertir su sede en un edificio ecológico

La ONU quiere seguir siendo un ejemplo arquitectónico. En plena camapaña contra el calentamiento global, el organismo va a reformar su sede central, en Nueva York, para convertirla en un ejemplo de edificio ecológico.

El cuartel general de la ONU es uno de los edificios más conocidos del mundo y su diseño sentó hace cinco décadas la base arquitectónica para construcciones similares. El obetivo principal del proyecto para su remodelación es repetir la historia y convertirse de nuevo en un modelo para las obras de modernización de otros edificios de avanzada edad, como explica Alicia Bárcena, la mano derecha del secretario general de la ONU para cuestiones administrativas.
Desde su inicio, los arquitectos de la ONU tuvieron en cuenta factores medioambientales, pero de otro tipo: la orilla sobre la que se alza el emblemático rascacielos de las Naciones Unidas olía tan mal que los urbanistas de este distrito decidieron no poner ventanas con vistas al East River para evitar que el aire contaminado entrera en los apartamentos.
Cinco décadas después, ese mismo terreno es uno de losmás preciados de la isla de Manhattan. Y, al igual que la ciudad que lo hospeda, el cuartel general de la ONU también se adapta a los nuevos tiempos con un ambicioso proceso de remodelación con sello ecológico. "Será un edificio que cumplirá con la normativa local en el ámbito de la seguridad, saludable y con los mayores niveles de eficiencia y respeto al medioambiente", reitera convencida Bárcena.

Quitar el amianto

Para adaptarse a los nuevos tiempos, tendrá que retirarse antes el amianto que contamina el rascacielos. La operación es complicada, ya que el manejo de este mineral ocasiona un polvo que entra en los pulmones y causa graves enfermedades. Además, hay que sustituir toda la red eléctrica y de refrigeración. La mención de Bárcena a la impronta ecológica de la obra no es casual, porque el secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, está poniendo un énfasis especial en la lucha contra el cambio climático y cree que la sede de la ONU debe predicar con el ejemplo.
Los expertos explican que los beneficios de este tipo de remodelaciones son enormes, porque con imaginación se puede consegir importantes ahorros en el uso de la energía, mejorar la calidad del aire y hacer un uso eficiente de recirsos como el agua. Por eso los arquitectos e ingenieros encargados de la obra están trabajando ahora sobre la premisa de conseguir un ahorro de hasta el 30% en el uso de la energía una vez que los trabajos estén terminados.
Para ello se prestará especial atención a la superficie acristalada del rascacielos y a la reducción de las emisiones de dióxido de carbono del sistema de calefacción, y se está pensando en un nuevo sistema para enfriar el edificio, como el que ya se usa en otros rascacielos más modernos en Manhattan, que utilizan el agua de lluvia para la refrigeración, los sanitarios y el sistema de riego de las plantas en el interior y los jardines.
Las obras comenzarán el año próximo, con la construcción de un edificio temporal donde se reunirá la Asamblea General entre 2009 y 2011, mientras se remodela la cámara principal del edificio de la ONU. En paralelo, se irá trabajando sobre la vieja estructura del rascacielos de cristal. El valor total del proyecto se estima en unos 8.000 millones de dólares (6.000 millones de euros), de los que la gran malloría irán destinados a la fase inicial de los trabajos.
SANDRO POZZI
EL PAÍS, viernes 3 de agosto de 2007

02 agosto 2007

El corredor de Noé

El Gobierno australiano no está dispuesto a esperar más. Algunos científicos temen que la temperatura media se eleve unos tres grados en los próximos 50 o 100 años en Australia, una de las zonas del planeta que más puede verse afectada por el cambio climático. Este aumento de temperaturas alteraría de forma significativa los ecosistemas de varias especies: aves, reptiles y mamíferos necesitarían desplazarse para sobrevivir. Para permitir este flujo, la Administración va a crear en el noreste del país, entre los llamados Alpes Australianos del Estado de Victoria y Queensland, un corredor biológico paralelo a la costa, de unos 2800 kilómetros de longitud.
De esta manera, las especies podrán moverse sin interferencia directa de carreteras, vías de tren, pistas de esquí o cultivos. Se creará un gran espacio libre de influencia antropogénica por el que las especies salvajes podrán migrar de sur a norte o viceversa según sus necesidades de alimento, temperatura y hábitat. Las infraestructuras existentes o futuras estarán diseñadas para no interferir en la naturaleza. Es la primera gran respuesta a los posibles efectos del cambio climático en Oceanía.

---EN CONSTRUCCION---

Botijos contra el cambio climático

La Fundación Tierra ha lanzado una campaña denominada "Botijos contra el cambio climático" para promover el uso del tradicional artilugio de alfarería muy maditerráneo que mantiene el agua fresca. La superficie porosa de estos peculiares cántaros es de arcilla cocida y permite que se comporte como la piel humana, es decir, deja salir el sudor para refrescar el interior. Por ese motivo, el botijo se ha convertido en una herramienta muy eficaz para ahorrar en el consumo de energía, pues el proceso de refrigeración evaporativa permite que por cada gramo de agua evaporado se consigan retirar 500 calorías del agua del cántaro.


LA RAZÓN Inmobiliaria Nº 97(bis) 2 de agosto de 2007

El alto precio del petróleo desata una fiebre mundial por la energía atómica.

Según un estudio del Real Instituto ElCano, desde el punto de vista energético, en la primera mitad de siglo, nos enfrentamos a cuatro retos fundamentales:

- La más que probable llegada del declive de la producción mundial de petróleo;

- El acusado incremento de la demanda energética global, debido a la importante irrupción de las economías emergentes como China o India;

- La elevada concentración de las reservas finales de hidrocarburos en áreas de inestabilidad, y la consiguiente competencia que se desatará por acceder a estos recursos;

- Y por último la obligación de reducir las emisiones contaminantes.
Estrategia nuclear
Ante este futuro energético los países ven en el plan nuclear una apuesta de futuro, como un modo de diversificar las fuentes energéticas. Una de las grandes ventajas de las centrales nucleares es la no emisión de gases contaminantes, dato importante si contamos con el deseo de todas las economías de seguir creciendo, sin tener que pagar por superar la tasa de emisiones contaminantes.

Este es el caso de la nueva política energética de la UE, que pretende reducir las emisiones de CO2 en un 20% para 2020, a la vez que propone que en 2050 el mix energético esté basado en energías renovables, en biocombustibles, en tecnologías de combustión limpias para carbón y gas, en energía nuclear de fisión de cuarta generación y en energía nuclear de fusión.

Los países emergentes han visto igualmente en la energía nuclear una manera de seguir creciendo. China, segundo consumidor mundial de energía, con el objetivo de reducir su dependencia energética, podría aprobar la construcción de cuatro nuevos reactores.
Pero, sin duda, uno de los más novedosos saltos a la energía nuclear es el del sureste asiático (Birmania, Filipinas, Indonesia, Malasia, Tailandia, Vietnam). Para entender este cambio de estrategia hay que considerar que, según los analistas, la llegada de la energía nuclear al sureste asiático podría ayudar a la región a aliviar de forma relativamente barata su gran demanda energética con menos emisiones.
Peligros colaterales
El previsto auge nuclear mundial ha levantado la voz de alarma en algunos sectores, especialmente ante los riesgos potenciales en Oriente Medio y Asia. Entre los temas que preocupan se encuentran el riesgo de un ataque terrorista o seísmo en la zona de las centrales. No en vano, está reciente el caso de la fuga de la mayor central eléctrica de combustible nuclear del mundo, en Japón, por un terremoto.
Otro de los recelos que se presenta ante este tipo de energía es la finalidad con que ésta puede ser usada. Tener armas nucleares ha sido siempre un símbolo de poder, restringido a unas pocas potencias mundiales. Por eso, los nuevos planes asiáticos serán desarrollados en colaboración con la OIEA - Organismo Internacional de Energía Atómica-, que quiere mantener esta región libre de armamento nuclear.
Por último, es reseñable el aumento de precio de uno de los elementos utilizados, el uranio, como consecuencia de la apuesta masiva por este tipo de nergía. Desde enero pasado, casi se ha duplicado, y desde 1998 se ha encarecido un 1600%.


LA GACETA DEL JUEVES, 2 DE AGOSTO DE 2007

01 agosto 2007

El Gobierno reconoce que su plan contra el cambio climático no cumplirá con Kioto

El plan estrella del Gobierno, presentado tras el Consejo de Ministros especial sobre Cambio Climático, no permitirá que España cumpla con los compromisos que adquirió en Kioto. Así lo han reconocido los secretarios generales de los ministerios de Medio Ambiente e Industria, Arturo Aizpiri e Ignasi Nieto. Eso sí, a pesar de no cumplir con los objetivos marcados en la cumbre japonesa, se reducirán, según el Gobierno, de forma importante las emisiones de gases contaminantes españolas. La Estrategia de Ahorro y Eficiencia Energética prevé que en 2012 las emisiones de CO2 estén un 37% por encima de los niveles de 1990. En Kioto se marcó que había que estar sólo un 15% por encima de aquéllos niveles. La mejoría de once puntos sobre la situación actual no será suficiente para alcanzar el objetivo final.
No es el único punto en el que el plan del Gobierno ofrece lagunas. Tampoco está bien atado el proyecto. ¿Por qué?. Porque la mayor parte de las medidas tienen carácter transversal, no entre ministerios sino entre administraciones. Las comunidades autónomas y los ayuntamientos tendrán que sentarse en una mesa junto al Gobierno para debatir el plan. "Cada una tiene una realidad distinta", reconoció Aizpiri, que dejó para la próxima conferencia de presidentes autonómicos la última palabra de, en concreto, 118 de las 198 propuestas. "Pedimos a todas las administraciones que tengan la misma ambición que ha mostrado el Gobierno", explicó. No aclaró quien correrá con la mayor parte de los gastos.

Sobre las bonificaciones a los vehículos ecológicos en el impuesto de circulación, Aizpiri explicó que hay que cambiar la Ley de Haciendas Locales, lo que hace muy dificil que la medida pueda estár en marcha durante esta legislatura.

Sí parece que se empezará con el plan renove de calderas (se suprimirán todas las de carbón), electrodomésticos y flotas de coches. En total, el Gobierno ha previsto invertir 2.365 millones de euros. De ellos, 480 son adicionales sobre lo que estaba previsto en el anterior plan. "Invertimos ahora para ahorrar más de 40.000 millones después", emplico Nieto.

LA RAZÓN . Miércoles 1 de agosto de 2007