15 diciembre 2010

Las renovables ahorran al sistema sanitario 148 millones de euros

Elena Alonso
Las emisiones evitadas de gases de dióxido de azufre, SO2, y óxidos de nitrógeno, NOx, con la sustitución de combustibles fósiles por energías renovables evitaron en 2009 la pérdida de 982.000 días de vida de seres humanos
, un ahorro del gasto sanitario en España de cerca de 148 millones de euros, según el “Estudio del Impacto Macroeconómico de las Energías Renovables en España en 2009”.
El estudio, elaborado por Deloitte para la Asociación de Productores de Energías Renovables, APPA, y presentado hoy en Madrid, asegura, además, que “en el horizonte del 2020 estos valores se duplicarán”. En concreto, en 2009 se evitó la pérdida de 178,7 mil días por las emisiones de SO2 evitadas y 803,8 debido al NOx que no se emitió.
Según explica el informe, esta relación entre SO2 y NOx y pérdida de días de vida del ser humano, se ha realizado de acuerdo a diferentes estudios basados en estimaciones sobre las emisiones de las grandes plantas de combustibles fósiles en Estados Unidos, a la generación sustituida de este tipo de energía y a análisis ya existentes sobre el impacto sanitario derivado de la presencia de estos gases.
LA RAZÓN, Martes 14 de diciembre de 2010

Las renovables ahorraron 4.830 millones a la factura energética el pasado año

S.C. - Madrid

Las energías renovables contribuyeron al PIB nacional en 2009 con 8.525 millones de euros, el 0,81% del total, según el estudio elaborado por Deloitte para la asociación de productores de renovables, APPA. El sector, que ha superado en peso en la economía al sector textil, el pesquero o el del calzado, abarató la factura eléctrica en 4.835 millones, según el mismo estudio. La razón es simple: las energías renovables entran a precio cero en el mercado eléctrico y desplazan a tecnologías de generación con mayores costes.
Con las cifras de Deloitte en la mano, el presidente de APPA, José María González Vélez, defendió una vez más el discurso de las empresas que representa: las renovables no solo no son caras (las primas que recibieron en 2009 ascendieron a 4.604 millones, pero abarataron más la factura eléctrica) sino que son fundamentales para una economía moderna.
Con 99.850 empleos y exportaciones de 3.024 millones, las empresas de renovables, subrayó González Vélez, atraviesan un momento delicado, de parálisis, pérdida de empleo -20.000 puestos en 2009- e incertidumbre. Se enfrentan, además, a críticas interesadas como las que atribuyen el llamado déficit tarifario al aumento de las primas a las tecnologías verdes. APPA, disgustada con la gestión del Ministerio de Industria, sostiene que las primas constituyen un coste más del sistema eléctrico, "como tantos otros", pero que no empañan las aportaciones de estas tecnologías al conjunto de la economía.
Ni el ministro de Industria, Miguel Sebastián, ni el secretario de Estado, Pedro Marín, "ignoran el papel fundamental de las renovables" dijo González Vélez, si bien han tenido que adoptar medidas "más preocupados por el déficit de tarifa o por el lobby del gas y de otros". En ese apartado de discrepancias, APPA ha convocado una junta para el próximo 12 de enero en la que estudiará los "aspectos retroactivos" del nuevo real decreto de revisión de primas a la energía fotovoltaica. La junta decidirá si lleva la norma a los tribunales.
EL PAÍS, Miércoles 15 de diciembre de 2010

12 diciembre 2010

La compra de árboles naturales en Navidad ayudará a combatir el cambio climático, según expertos

MADRID, 12 Dic. (EUROPA PRESS)

La compra de árboles naturales en Navidad es más recomendable que la adquisición de árboles de plástico, puesto que ayuda a combatir el cambio climático al capturar mayor cantidad de dióxido de carbono durante su etapa de crecimiento en los viveros, según ingenieros forestales y de montes.

Así, para el director técnico del Colegio de Ingenieros de Montes, Jesús González, los árboles naturales son la opción "preferente" en caso de poder elegir. En este sentido, ha explicado en declaraciones a Europa Press que este tipo de árboles pasan en viveros seis o siete años y es durante esta etapa cuando "más rápidamente" crecen y 'fijan' el CO2.

En esta misma línea, el secretario general del Colegio de Ingenieros Técnicos Forestales, Raúl de la Calle, apuesta también por los ejemplares naturales, puesto que el plástico "no deja de ser" material procedente de hidrocarburos, que necesita para su creación "cantidades importantes" de gases de 'efecto invernadero'.

De la Calle ha resaltado la "concienciación" de las personas que optan por este modelo de árbol, puesto que también permite su reutilización, incluso como abono. Asimismo, en el caso de los de plástico, González ha remarcado que su fabricación se da mayoritariamente en países fuera de España, como China.

Para ambos ingenieros, la utilización de los árboles naturales "no está reñida" con la ecología, puesto que no se corta "ni uno sólo" de ellos. Así, los ejemplares provienen en su mayoría de viveros del norte y noreste de España --País Vasco, Navarra y Cataluña, principalmente-- y los casos en los que un particular decide cortar un árbol por su cuenta son "en zonas muy concretas y poco significativos".

ABETO DEL CAÚCASO Y ABETO ROJO

Entre las recomendaciones de los expertos para la elección de los árboles se incluyen el abeto del Cáucaso o de Normandía (Abies nordmanniana) y el abeto rojo (Picea abies). El primero, que puede alcanzar hasta 25 metros de altura, procede de Asia Menor, Grecia y Cáucaso. Por su parte, el segundo puede alcanzar hasta 50 metro y procede del Norte y Centro de Europa.

Según el colegio de Ingenieros de Montes, tanto el abeto blanco (Abies alba) como el pinsapo (Abies pinsapo) son especies que no hay que adquirir para los hogares por ser "muy delicadas" e incluso estar protegidas en algunas comunidades autónomas. El abeto blanco lo podemos encontrar en los Pirineos y el pinsapo, en serranías de la provincia de Cádiz y Málaga a partir de 1.000 metros de altitud.

¿UN SACERDOTE O EL REY JORGE?

La tradición del árbol de Navidad se remonta al siglo XIX, y es una creación europea que pronto se extendió a América y finalmente a otros continentes. Sin embargo, su auténtico origen es dudoso, y en torno a él han nacido diferentes relatos (verdaderos o falsos) que implican siempre el "bondadoso" espíritu de la Navidad.

Una de esas historias sitúa el nacimiento de la tradición en Alsacia, donde vivió hace ya cuatrocientos años un sacerdote que, cada noche de Navidad, repartía entre los menos favorecidos de su pueblo alimentos, ropa y dinero que recolectaba durante el año.

Un día, al sacerdote se le ocurrió colgar los regalos en las ramas de un abeto próximo a la iglesia. Los pobres podrían así disfrutar además del cielo estrellado de la noche clara mientras cantaban bajo el árbol cánticos sagrados, que ya quedó instaurado como centro de la fiesta navideña.

Otro relato lleva la tradición a Inglaterra y la sitúa en el siglo XVIII bajo el reinado de Jorge III. La esposa del rey, la reina Carlota, se caracterizaba por su bondad con los súbditos y en el año 1765 decidió instalar en uno de los salones más grandes de palacio, un árbol de Pascua adornado con guirnaldas, luces, juguetes y toda clase de regalos.
EUROPA PRESS, Domingo 12 de diciembre de 2010

11 diciembre 2010

El apoyo de EE UU, China y Japón acerca el pacto en Cancún

RAFAEL MÉNDEZ | Cancún (Enviado especial)

El texto sobre la mesa incluye peticiones de todos los bloques: deja para 2011 la decisión sobre si habrá un acuerdo que sustituya al Protocolo de Kioto, reconoce que los compromisos presentados hasta ahora no basta para estabilizar el clima, los países ricos se comprometen a movilizar 100.000 millones de dólares al año en 2020, incluye un pacto para reducir la deforestación y, sobre todo, incluye en Naciones Unidas los compromisos de recorte de emisiones que los países enviaron de forma voluntaria a la ONU tras la Cumbre de Copenhague.

El borrador apunta a una prórroga de Kioto antes de 2012, cuando expira el actual periodo de cumplimiento. Esa era una exigencia de los países en desarrollo. A cambio, como pedía Japón, esa continuidad está supeditada a que avance la otra vía de negociación abierta, en la que están incluidos EE UU y China, que, por distintos motivos, no tienen limitación de emisiones. "El texto no apunta a la muerte de Kioto sino todo lo contrario", ha declarado la secretaria de Estado de Cambio Climático, Teresa Ribera.

EE UU se da por satisfecha con cómo queda reflejada la transparencia que exigía en la reducción de emisiones de China. Habrá consultas internacionales pero no serán "ni intrusivas, ni punitivas y respetarán la soberanía nacional". Si el texto sale adelante, solo habrá consulta internacional obligatoria si las emisiones se reducen con dinero internacional. Para los países en desarrollo que limiten sus emisiones sin dinero del primer mundo -China ha dicho en alguna ocasión que no lo necesita- esa obligación de información se reduce y se convierte en una opción.

Los ecologistas han mostrado su satisfacción porque el texto incluye alusiones a la gravedad del calentamiento y alude a la reducción de emisiones que pide el Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC). Esta mención es muy significativa de lo despacio que avanza la negociación. En la Cumbre de Bali, de 2007, la UE insistió en que se incluyera el rango de reducción de emisiones (entre el 25% y el 40%) para los países desarrollados que pedía el IPCC. La oposición de la Administración de George Bush dejó el texto en un pie de página. Ahora, tres años después, el IPCC sale del pie de página y pasa al texto del acuerdo. Aunque el texto pide limitar el calentamiento a dos grados centígrados deja abierta la puerta a que se revise más adelante para limitarlo a 1,5 grados, una petición de los pequeños estados isla.

En realidad, todo el borrador está lleno de sutilezas de ese tipo. La UE pedía el reconocimiento de que debía haber un acuerdo vinculante en 2011. No sale eso, sino que los países seguirán "discutiendo las opciones legales para llegar a un acuerdo" en la Cumbre de Durban (Sudáfrica) de 2011.

La inmensa mayoría de los países en el plenario ha apoyado el texto. Argelia, en nombre de los países africanos, ha destacado que "recupera la confianza en el sistema multilaleral" después del fiasco de Copenhague. Todo el mundo ha felicitado a la presidencia mexicana, que ha servido de puente y, al contrario que Dinamarca el año pasado, ha templado los ánimos y evitado los bloqueos. El trabajo de un año ha roto el bloque bolivariano (Venezuela, Cuba y Ecuador se desmarcaron de Bolivia). El presidente de Ecuador, Rafael Correa, había declarado en Cancún que el texto que se manejaba para frenar la deforestación era "un paso positivo". Los países tropicales esperan recibir una lluvia de dinero (público y privado) si evitan la deforestación.

Por contra, Evo Morales ha insistido en Cancún en un mensaje que no podía cosechar demasiados apoyos en la ONU: "O muere el capitalismo o muere el planeta". Preguntado sobre los aplausos en el pleno que recibió la presidenta de la cumbre al presentar los textos, el embajador de Bolivia ante la ONU, Pablo Solón, ha dejado claro que no le importaba estar en minoría: "Hemos venido a negociar, no a un show". Bolivia pide cosas como un tribunal internacional de justicia climática o que se reconozcan los derechos de la naturaleza. Según Solón, Bolivia no estaba sola en la negociación, porque tenía detrás "a los pueblos del mundo, reunidos en Cochabamba", en una cumbre climática paralela que organizó Morales en abril pasado.

El sistema de Naciones Unidas exige que no haya oposición a ningún texto. Se aprueban por aclamación y la oposición de Bolivia, Venezuela, Cuba, Nicaragua y alguno más consiguieron que la ONU no hiciera suyo el texto. Pero esta vez Bolivia está sola y, al contrario que en Copenhague, no levantó simpatías. En la capital danesa tenía argumentos porque la negociación se celebró a puerta cerrada, pero México se ha empeñado en evitar ese error. Los tradicionales aliados de Bolivia, como Cuba o Venezuela, han pedido que se escuchen las peticiones de la delegación de Evo Morales, pero han marcado distancias. ""No dejemos de escuchar a nadie porque sintamos que estamos cerca del éxito", ha señalado la representante de Venezuela, que en Copenhague, por contra levantó su mano ensangrenatada contra el texto.

Bolivia se ha quedado sola en su oposición al borrador de acuerdo presentado por México en la Cumbre del Clima de Cancún. En el plenario informal que acaba de terminar en la ciudad mexicana a las 00.00 (las siete de la mañana en España), el texto ha conseguido el apoyo de países que partían con posturas muy enfrentadas, como Japón, EE UU y China. También lo apoyan los pequeños estados-isla, la UE, los países menos desarrollados y la mayoría de los latinoamericanos. Solo Bolivia se mostró en contra, entre otras cosas porque no incluía peticiones tan poco realistas como la de crear un tribunal internacional de justicia climática.

Las principales ONG ecologistas, como Oxfam y Greenpeace, han valorado el acuerdo -aunque consideran que tiene lagunas-. Eso debilita aún más la posición de Bolivia. Los apoyos de las principales potencias han sidp saludados por aplausos en el plenario. "El Gobierno de China actuará de manera plenamente responsable frente al pueblo chino y los pueblos del mundo. Seguiremos con nuestro desarrollo verde y sostenible", ha declarado el jefe de la delegación china. "El texto no es perfecto pero es una buena base para seguir adelante. (...) Pongamos el mundo en un camino más sostenible", ha indicado Todd Stern, enviado especial de Cambio Climático de EE UU.

La ministra de Exteriores de México, Patricia Espinosa, muy felicitada por su gestión, concluyó: "Es evidente que hay mucho por hacer. Cancún no es el final sino el principio de una nueva etapa de cooperación sobre bases sólidas". A medianoche (las siete de la mañana hora peninsular española), la reunión se ha suspendido para negociar en los grupos antes de volver al plenario.

EL PAÍS, Sábado 11 de diciembre de 2010

Imagen: El País

10 diciembre 2010

Japón se planta y eleva el tono de la negociación a solo 24 horas del final de la Cumbre del Clima

RAFAEL MÉNDEZ Cancún, ENVIADO ESPECIAL
Japón se ha plantado: no acepta de ninguna forma un segundo periodo del Protocolo de Kioto a partir de 2012. Considera que, sin EE UU ni China, el tratado que alumbró la ciudad japonesa en 1997 "no es una forma justa de afrontar el cambio climático". Así lo ha afirmado en rueda de prensa en Cancún Akira Yamada(en la imagen), representante del Ministerio de Exteriores japonés. Como los países en desarrollo hacen de la continuidad de Kioto una reivindicación innegociable, la negociación se encuentra en un punto muy delicado. La UE busca fórmulas vagas para redactar un texto que satisfaga a ambas partes.
Yamada ha mostrado sus argumentos de forma convincente: "Sabemos que muchos países en desarrollo insisten en un segundo periodo de cumplimiento de Kioto, pero creemos que no es justo. No es una forma justa de afrontar el cambio climático. Las emisiones del Anexo I (los países obligados por Kioto) solo cubren el 27% y ese porcentaje bajará más y más. Necesitamos a todos los grandes emisores dentro".
"Que los grandes emisores bajen a la arena"
EE UU no ratificó Kyoto, y el tratado no obliga a China, India ni Brasil. Así que solo la UE, Japón, Canadá, Rusia y Australia se ven afectados. La UE aceptará una prórroga de Kioto si se incluye alguna mención a que más adelante habrá un tratado vinculante que incluya a EE UU y China (aunque los europeos están dispuestos incluso a que no se mencione explícitamente quiénes serían los países afectados por ese nuevo tratado). Canadá y Australia están cómodos detrás del paraguas de Japón. No salen en público pero apoyan su reivindicación. La discusión sobre el segundo periodo de Kioto es antigua, pero gana importancia e intensidad conforme se acerca 2013, cuando expira el primer periodo firmado, ya que no se vislumbra una salida.
"Que los grandes emisores bajen a jugar a la arena", ha pedido Yamada. Japón ve que las emisiones por habitante de su principal competidor, China, están aún muy lejos de las de EE UU, pero ya no lo quedan tanto del resto de países desarrollados. Mientras, Japón -cuyo coche más vendido es el poco contaminante híbrido Prius- se ve como el único pagano en la lucha contra el calentamiento.
La delegación de Japón se muestra inflexible y, a preguntas de un periodista chino, afirmó que estaban preparados para aguantar cualquier presión: "Puede ser cierto que la presión internacional caiga sobre Japón, pero explicamos sinceramente nuestra opinión. No es solo por nuestro interés, es que no es justo ni efectivo para atajar el reto del cambio climático". "Queremos un único instrumento legalmente vinculante en el que estén todos los grandes emisores", concluyó Yamada.
Europa considera que Kioto, el primer hito en la lucha contra el cambio climático "no puede ser el problema de Cancún", como declaró la ministra española de Medio Ambiente, Rosa Aguilar. Así que la UE busca fórmulas de compromiso, vagas y sutiles, que pueda ser aceptadas por todo el mundo para, al menos, seguir negociando hasta la Cumbre del Clima de Durban (Sudáfrica) en 2011.
Los bloqueos y las posturas extremas son habituales en estas cumbres. Hay tanto en juego -reducir las emisiones implica revolucionar el sistema energético- que la costumbre es que las partes no cedan hasta el último segundo. Pero esta vez, incluso negociadores tradicionalmente optimistas miran de forma lúgubre el último día de la cumbre.
EL PAÍS, Viernes 10 de diciembre de 2010
Imagen: El País

09 diciembre 2010

Conferencia del clima de la ONU acelera el paso en busca de consensos

Ministros y jefes de Estado de 194 países en la conferencia del clima de la ONU en Cancún se enfrascaron con urgencia el miércoles en frenéticas negociaciones para poder anunciar el viernes al mundo avances contra el cambio climático que representen esfuerzos de todos.
"Estamos manteniendo consultas informales muy activas", dijo el negociador brasileño Luiz Alberto Figueiredo al final de la tarde.
Los avances del día se concentraron en uno de los principales escollos en las negociaciones: una extensión más allá de 2012 del protocolo de Kioto que compromete a los países ricos a cortar sus emisiones y que Japón no quiere.
"Estamos explorando el lenguaje (...) que podría resolver la división entre los (países) que no quieren un segundo período (de Kioto pos 2012, como Japón, Canadá y Rusia) y los que quieren un claro mensaje de segundo período (Europa). Continuaremos trabajando intensamente esta noche y mañana" jueves en ese asunto, dijo Figueiredo.
Para resolver los grandes temas que bloquean todavía la negociación la presidencia mexicana convocó a una reunión informal de unos 50 países que continuará el jueves, informó el negociador mexicano Luis Alfonso de Alba. Ese formato irritó a Bolivia y su negociador, Pablo Solon, rechazó participar y pidió reuniones formales con los 194 países.
"Bolivia no se ha retirado de las conferencias", aclaró Alba.
El mensaje más claro y repetido en Cancún por los negociadores es que la reunión no puede terminar el viernes sin resultados, bajo el fantasma de la conferencia de Copenhague en 2009, que frustró gigantes expectativas por falta de acuerdo de los países.
"No nos podemos ir de Cancún con las manos y la esperanza vacías", afirmó el presidente de Ecuador, Rafael Correa.
Reunidos desde el pasado 29 de noviembre, los 194 países buscan un "paquete equilibrado" de decisiones para la lucha contra el cambio climático, que requiere de concesiones y esfuerzos de naciones ricas y en desarrollo.
"Creo que un acuerdo está al alcance. Pero eso no quiere decir que ya lo tenemos en las manos", dijo la presidenta de la conferencia y canciller mexicana, Patricia Espinosa.
Los países en desarrollo han sumado fuerzas para exigir una extensión del protocolo de Kioto.
Los países ricos quieren que las grandes naciones en desarrollo, como China, la mayor emisora de gases nocivos al clima del planeta, y otros como Brasil e India, también asuman oficialmente sus compromisos de reducción de emisiones y permitan un sistema claro de verificación, un tema sobre el que los chinos mostraron apertura pese a sus reticencias iniciales.
Ricos y pobres han puesto sus ojos en Estados Unidos, el segundo mayor emisor del planeta, no comprometido con Kioto y cuyos compromisos de reducir 17% sus emisiones hasta 2020 son considerados bajos y aún enfrentan la oposición frontal del Congreso.
Los negociadores tienen menos de dos días para acabar de definir un mecanismo contra la deforestación, ayudas para que los países más vulnerables enfrenten el impacto del clima y un fondo que debe llegar a 100.000 millones de dólares anuales para la lucha mundial contra el cambio climático.
"El último borrador de la negociación nos da esperanza de que puede acordarse en Cancún un fondo del Clima, que sería un gran paso hacia la creación de una estructura que apoyará a los países en desarrollo, ayudándoles a reducir sus emisiones, y protegiendo a los más vulnerables del impacto del cambio climático", dijo Tim Gore, asesor de Clima de la ONG Oxfam.
El secretario de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, urgió el miércoles a los países a alcanzar acuerdos que, aunque no perfectos, signifiquen avances necesarios en la lucha contra el cambio climático.
Las negociaciones entran en una fase de maratónicas negociaciones. "A partir de ahora comienza ese proceso de salas cerradas, negociadores nerviosos, sin comer muriéndose de hambre, trabajando hasta altas horas de la noche", delineó la ministra brasileña.
TERRA, Miércoles 8 de diciembre de 2010

En Cancún, unos temen y otros sueñan con la idea de captar CO2 bajo tierra

Una solución milagrosa al cambio climático para algunos y una pesadilla para otros: un posible impulso a favor de la captación y almacenamiento de dióxido de carbono despertó antagonismos durante la conferencia de la ONU sobre el clima en Cancún, México.
Las negociaciones internacionales sobre el clima están centradas en la reducción desde el origen de las emisiones de dióxido de carbono (CO2), en particular a través de energías renovables, para frenar el alza de la temperatura del planeta.
Pero empieza a tener cabida, incluso en este contexto, la idea de captar el principal gas de efecto invernadero una vez emitido por una refinería o una fábrica de cemento, transportarlo a un campo gasífero o petrolero agotado y enterrarlo a 2.000 de profundidad.
Así, acaba de ser agregado a la mesa de negociaciones un texto que prevé que, bajo ciertas condiciones, la captación y almacenamiento de CO2 (conocida como CCS en inglés), pueda convertirse en un proyecto financiado en el marco del Mecanismo de Desarrollo Limpio previsto en el Protocolo de Kioto.
Este Mecanismo está destinado a incitar a los países industrializados o empresas a invertir en proyectos de tecnologías "limpias" en los países en desarrollo, y obtener así créditos de emisión de dióxido de carbono que les permitiría alcanzar sus objetivos de reducción de emisiones.
Discutida desde 2005 e impulsada por muchos países, como por ejemplo -recientemente- por Arabia saudita, esta opción que nunca había sido tan claramente formulada preocupa a Greenpeace, que la ve como una forma de garantizar "una subvención encubierta a las industrias de energías fósiles".
"Es lo contrario al espíritu de este Mecanismo, que es una herramienta destinada a promover la transición energética de los países en desarrollo, respetuosa del medio ambiente", se indignó la portavoz de la rama francesa de la ONG, Karine Gavand.
Y "esta tecnología ni es limpia ni es duradera", afirmó Marin Kaiser, otro miembro de la ONG.
Aún en etapa experimental, la idea suscita numerosos interrogantes: ¿Cómo asegurar que las criptas donde se almacenaría el CO2 no tendrán fugas? ¿Qué ocurre en caso de terremoto? ¿Cuáles son los riesgos de contaminación de las fuentes subterráneas de agua potable? ¿Qué se puede decir de los peligrosos solventes necesarios para extraer el CO2?
Pero no todo el mundo está en pie de guerra contra esta tecnología, aún extremadamente costosa y a prueba en Europa, Australia, Estados Unidos y Canadá.
Para algunos, como la fundación Bellona, cuya sede está en Noruega, sería una locura prescindir de esta técnica que, según la Agencia Internacional de Energía (AIE), podría contribuir a reducir en un quinto las emisiones de CO2 en el sector energético.
"Soy un guerrero climático y la CCS es una de las armas más poderosas", explicó a AFP el noruego Paal Frisvold, presidente del comité de administración de Bellona Europa.
Los defensores de la CCS afirman que los países en desarrollo, sobre todos los grandes emergentes, continuarán a pesar de todo usando energías fósiles -como el carbón en China- para sostener su crecimiento.
En Europa se espera que se realicen seis a ocho proyectos de prueba a gran escala. "Y todavía faltan cinco años para verificar su buen funcionamiento, especialmente en el almacenamiento", explicó Frisvold.
Y si bien para 2020 nada dice que el Protocolo de Kioto -que establece objetivos de reducción de CO2 en los países industrializados- esté todavía en vigor, cualquier decisión a favor de esta tecnología en Cancún "es una señal muy importante para la industria y los inversores", aseguró Frisvold.
TERRA, Miércoles 8 de diciembre de 2010