31 julio 2007

Los aparatos de clase A ahorrarían un millón de toneladas de CO2.

Si los viejos electrodomésticos desaparecieran de los hogares las emisiones de CO2 en nuestro país se reducirían en más de un millón de toneladas al año. Lo que sin lugar a dudas, jugaría un papel fundamental en el ahorro energético y en la reducción del impacto medioambiental, gracias a su menor consumo de agua y electricidad.
El estudio "Proyecto Eco Saving", realizado por Electrolux, revela que la sustitución de los viejos electrodomésticos por los de clase energética A supondría un ahorro anual de cerca de 175 millones de euros. Pero más allá de lo económico, el ahorro energético también es importante: 1.400 millones de Kw/h, una cantidad equivalente al gasto que se generaría si todos los hogares de la muestra (en la que han participado 32 ciudades) dejaran encendida una bombilla de 60 vatios 69 días.
Además el consumo de agua se reduciría de manera significativa. En total, 21.000 millones de litros anuales, una cantidad que equivale a lo que se gastaría si los hogares de la muestra dejaran abierto un grifo derante 3 horas. Y si seguimos con comparaciones, hay que decir que la cantidad de emisiones de CO2 que se ahorraría España es equivalente a la que se emitiría si todas las familias de esas 32 ciudades condujeran a la vez sus coches durante 526 kilómetros. Se calcula que en Europa existen 188 millones de viejos electrodomésticos. En el estudio han participado 793 ciudades de 22 países europeos, lo que permite trasladar los resultados fuera de nuestras fronteras. Así, si todos los hogares de estos áíses europeas reemplazaran su antigua frigorífico, congelador, lavadora y lavavajillas por otros más eficientes, se dejarían de emitir a la atmósferacasi 18 millones de toneladas de CO2. En términos monetarios, el ahorro económico sería de más de 3.000 millones de euros.

Cuestión de letras

Unos datos, que ponen de relieve, una vez más, el ahorro energético que se puede conseguir con un uso eficiente de los equipamientos de nuestras viviendas. Si el coste es un problema, conviene saber que la diferencia de precio entre un aparato de la clase A y otro de la clase C se amortiza en 5 años gracias a su menor consumo. En total son 7 las etiquetas (A, B, C, D, E, F, G) identificadas cada una de ellas con un color. El consumo de los electrodomésticos con etiqueta A es el más eficiente y los que lucen un G son los que más consumen haciendo lo mismo.

NATURAL/ABC MARTES_31_7_2007

30 julio 2007

Llegan los primeros helados del mundo "cero emisiones"

La marca estadounidense Ben&Jerry´s se une a una iniciativa auspiciada poe 38 ONGs en Holanda para elaborar productos climáticamente neutros.


De un helado se espera que esté rico, que sea refrescante ... cosas que afectan al paladar y a las sensaciones placenterasque produzca saborearlos. Pero que sean climáticamente neutros no aparece entre las aspiraciones de los aficionados a esta maravilla de la gastronomía.


Sin embargo, la marca estadounidense Ben&Jerry´s que nación en 1978 con el objetivo de "hacer los mejores helados del mundo", años después se propueso hacerlos respetando el medio ambiente. Proceso que comienza con la toma de conciencia de que "si se derrite, se echa a a perder", máxima que en Ben&Jerry´s vale lo mismo para un helado que para el Polo Norte. Por eso la compañía se implicó en la iniciativa HIER para fabricar productos climáticamente neutros, auspiciada en Holanda por un consorcio de 38 ONGs entre las que están WWF, Green Peace y Amigos de la Tierra.


ENERGÍAS RENOVABLES

Andrés Núñez, director de marketing de la marca en España, explica que "cualquier proceso productivo tiene un impacto ambiental mayor o menor. Que un helado sea climáticamente neutro significa que en todos los pasos necesarios para su fabricación, distribución y consumo, las emisiones de gases de efecto invernadero han sido eliminadas, reducidas o compensadas para que su impacto en el medio ambiente sea nulo".
"La clave de la iniciativa HIER, precisamente está - continúa- en compensar el impacto inevitable sólo después de haber realizado dos primeros pasos: usar el mínimo de recursos y utilizar el máximo de energías renovables". Y, de momento, los helados que salen de su planta holandesa de Hellendoorn ya cumplen el objetivo de ser climáticamente neutros "y son los primeros del mundo" en hacerlos, enfatiza Núñez.

El proceso comienza analizando el impacto mediambiental de toda la cadena de producción. Mediante el Análisis de Ciclo de Vida (ACV) comprobaron que por cada tarrina de 500 ml generaban un kilogramo de dióxido de carbono (CO2), contando desde el cuidado de las vacas y la producción de la leche en las granjas hasta que el helado llegaba al cono. El primer paso suponía un 20%, y la refrigeración en las heladerías y puntos de venta el 23%. Pero el mayor impacto, el 45%, se produce en la obtención del resto de ingredientes (transporte y producción de la fruta, vainilla, chocolate, etc). "La contaminación generada por la producción en la fábrica se ha reducido al uno por ciento, porque en los dos últimos años se ha transformado y se usan energías renovables, eólica y solar", aclara Núñez.

GRANJAS SOSTENIBLES

Con estos datos a la vista, las acciones emprendidas por la compañía son diversas: para reducir consumos y emisiones "se ha puesto en marcha un programa de granjas sostenibles y elaborado un plan para que el máximo de ingredientes posible proceda de proveedores locales, para evitar las emisiones del transporte. Además estamos desarrollando nuevos sabores con ingredientes procedentes del entorno geográfico como base", explica. Otras investigaciones en marcha son: "Un prototipo de congelador con tecnología termoacústica con la Universidad de Pensilvania, una alimentación para que las vacas produzcan menos metano y envases 100% compostables".

A TU SALUD . Domingo 29 de julio de 2007 (LA RAZON)

25 julio 2007

Los árboles de Madrid, con estrés, según los expertos

Al igual que sus habitantes, los árboles de Madrid también sufren estrés: sus hojas se arrugan, se llenan de hongos y finalmente acaban por secarse. Las obras, la contaminación y el cambio climático están causando verdaderos estragos en las zonas verdes.
De los cerca de 230.000 árboles que se encuentran en las calles de la capital, "todos están afectados por el estrés", según han comprobado los delegados de CC OO en el Servicio de Inspección, el área que se encarga de vigilar las plantas. De ellos, los más indefensos "son los mñas de 13.000 plantados en el último año en el entorno de la M30" porque "aún les falta adaptación". Este problema provocará que "en torno a un 15% de los mismos se seque antes de octubre", destaca Gemma Sánchez, portavoz de CC OO.

Raíces sin reservas

El nerviosismo arbóreo se debe a "las zanjas y a la compactación del suelo alrededor del árbol que impide que las raices se oxigenen". Algo en lo que coincide Mariano Sánchez García, conservador del Jardín Botánico, que resalta que "las plantas están estresadas por el calor que el asfalto transmite a las raices, lo que les deja sin reservas". Además, "la contaminación, la lluvia ácida o los golpes en su tronco hacen que "se debiliten, siendo así más propensos a los hongos".
Otro de los factores que estresa a los árboles es el cambio climático. "Las temperaturas de este verano son atípicas en julio, lo que altera sus ciclos de floración", apuntan desde CC OO. Estos desajustes hacen que "la caída de la hoja se retrase", subraya Mariano Sánchez García.
Fuentes del Ayuntamiento de Madrid aseguraron ayer que "en el primer año de vida es normal que algun árbol muera porque se está aclimatando".

BEATRIZ CASTRILLO
20 MINUTOS MIERCOLES 25 DE JULIO DE 2007

24 julio 2007

Para reflexionar: "Cambia el clima, nosotros no"

Va para diez años que España suscribió en 1998 el Protocolo de Kyoto y hace poco más de cinco que fue unánimemente ratificado por el Parlamento Español. En la historia reciente del Reino de España pocas cuestiones han suscitado tanta unanimidad en la sociedad española: nunca nadie, desde ningún foro público, levantó una voz crítica sobre Kyoto y los compromisos que, en su concreción europea, adquirió España.
Las advertencias razonables de gente razonable sobre la imposibilidad de que España cumpliera esos compromisos eran formuladas privadamente y con miedo: nadie quería afrontar el riesgo de ser arrollado por la maquinaria unánime de la corrección política, impuesta desde todos los extremos del arco parlamentario y extraparlamentario: nadie discute la ley de la gravedad y nadie discute Kyoto; punto pelota.
Como no se puede discutir, nadie lo discute, pero los datos están ahí: de entre todos los países abajo firmantes de Kyoto, España es el que menos ha cumplido con sus compromisos, de forma que entre 1990 y 2005 sus emisiones de gases de efecto invernadero han aumentado más del triple de lo libremente comprometido por el Gobierno y unánimemente aprobado por el Parlamento. Y cuando, en abril de 2002, el Congreso de los Diputados votó unánimemente la adhesión a Kyoto, España ya había renunciado de hecho a los objetivos de Kyoto.
No estamos ante una nueva manisfetación de la recurrente dicotomía entre la España oficial y la real, ni del ensanchamiento de la brecha que separa a la clase política del común de la gente. Eso ocurrió en asuntos como el apoyo a la intervención militar en Irak, o en la aprobación e inmediata derogación del Plan Hidrológico Nacional o incluso la ley antitabaco y el Estatuto de Cataluña. Para mí tengo que se trata de algo diferente y más grave: la española es una sociedad, incluidos sus dirigentes, que ha renunciado a pensar , por tanto, no encuentra contrasentido alguno en vociferar contra el cambio climático, al tiempo que alimenta todas las calderas que lo provocan. Ojalá fuera esa hipocresía astuta de algunos países, que no tienen empacho en defender el libre comercio mientras se aferran al más rancio nacionalismo, pero me temo que en el caso español sólo se trata de inconsciencia bobalicona.

En el no debate sobre Kyoto y sus consecuencia, tanto positivas como negativas, para el bienestar económico del país y de su gente, sólo se ha permitido criticar la insolidaridad de Estados Unidos que, desde el principio, se negó a aceptar el Protocolo. Al ser la economía más grande del mundo, resulta lógico que Estados Unidos sea el país que más dióxido de carbono emite, aunque eso no impida que sus emisiones per cápita sean inferiores a las españolas. Pero precisamente a partir de ese "no", el debate climático ha tomado consistencia en la sociedad norteamericana. Y por el contrario, la unanimidad española es la que ha impedido una reflexión colectiva que acabara por crear una verdadera conciencia de la gravedad de los límites del problema.

Prestar oídos sordos al problema -como, por ciero, hizo el Gobierno hace dos semanas al aprobar un insustancial prograna de medidas no menos insustanciales- no supone que el problema no exista, ni tampoco que se vaya a solucionar por sí solo. Llegará un día no muy lejano, concretamente el año que viene, en que el problema se presentará de repente y la Unión Europea presente de golpe la factura de la borrachera energética, y España debará optar entre paralizar una parte sustancial de su aparato industrial o pagar unas cantidades de dinero insoportablemente grandes para obtener los derechos de emisión que compensen el exceso.

La única ventaja del drama que se avecina es que ningún partido podrá reprochar al otro su falta de visión y de decisión para hacer los deberes energéticos. Los dos han sido igualmente inconscientes e irresponsables. Son las ventajas del consenso y de la unanimidad.

JOSE MARÍA GARCÍA HOZ

ABC - OPINIÓN - 27 _ 07 _ 2007

El cambio climático ya altera las lluvias en todo el planeta

Las emisiones de gases de efecto invernadero de origen humano están ya cambiando los patrones de precipitaciones en el planeta. Los científicos lo han detectado por pimera vez. En el siglo XX aumentaron las precipitaciones en las latitudes medias del hemisferio Norte y disminuyeron en las regiones subtropicales y tropicales; sin embargo, en los trópicos y subtrópicos del sur ha aumentado la humedad.
Estos cambios "no pueden explicarse si se intenta ignorar el efecto del cambio climático inducido por el hombre y, además, pueden haber tenido ya efectos significativos en los ecosistemas, la agricultura y la salud humana en regiones que son sensibles a los cambios de las precipitaciones", afirman los autores de la investigación en el próximo número de la revista Nature.
Los científicos habían encontrado ya señales claras del cambio climático en marcha, como el aumento de la temperatura media en la superficie terrestre, variaciones en la temperatura atmosférica y el calentamiento del océano. Paro hasta ahora no habían podido distinguir cambios significativos en los patrones de precipitaciones a escala planetaria.
Afirman los expertos que los cambios observados en las precipitaciones no se pueden explicar atendiendo únicamente a la variabilidad natural del clima. El efecto de los altibajos normales, no forzados por las emisiones humanas "es demasiado pequeño", concluyen, para explicar la evolución de las lluvias en el planeta en las últimas décadas.
Este tipo de investigación permite a los científicos concluir en Nature que el cambio climático inducido por la actividad humana es responsable de entre el 50% y el 85% del aumento de las lluvias detectado en los territorios comprendidos entre los 40 y los 70 grados de latitud Norte.
Asimismo, cabe adjudicar a las emisiones de efecto invernadero artificiales entre el 20% y el 40% de la tendencia a la sequía registrada en las zonas tropicales y subtropicales del mismo hemisferio septentrional y de la mayor parte de la tendencia al incremento de la humedad en los trópicos y subtrópicos del hemisferio Sur.

ALICIA RIVERA

EL PAÍS, martes 24 de julio de 2007

23 julio 2007

Los árboles: aliados frente al cambio climático

1– Reducir el efecto invernadero.
Los árboles actúan como colectores de carbono. Una hectárea de bosque nuevo retiene unas 6,25 toneladas de carbono al año. Los árboles pueden absorber CO2 a un ritmo de 6 kilos por árbol y año. Los árboles alcanzan su fase de mayor producción de carbono hacia los 10 años de edad. En su conocido informe “Reforestar la Tierra”, el Worldwatch Institute calculó que nuestro planeta necesita que plantemos un mínimo de 130 millones de hectáreas de bosques sólo para recuperar y mantener la productividad del suelo y los recursos hídricos, satisfacer nuestras necesidades industriales y de leña para el Tercer Mundo y para eliminar de la atmósfera unas 780 millones toneladas de carbono al año con el crecimiento de los árboles. Esta cantidad representa aproximadamente un 25% de los 2.900 millones de toneladas de carbono que llegan actualmente a la atmósfera terrestre. Sólo con que en Estados Unidos plantaran 100 millones de árboles se podría reducir la cantidad de carbono en unos 18 millones de toneladas al año y, al mismo tiempo, ahorrar a los consumidores 3.200 millones de euros al año en gastos domésticos. Por cada tonelada de madera nueva que crece, se eliminan aproximadamente 1,5 toneladas de CO2 del ambiente y se producen 1,07 toneladas de oxígeno esencial para la vida. En 50 años, un árbol generará 24.000 euros en oxígeno, reciclará agua por valor de 28.000 euros y limpiará aire contaminado por valor de 48.000 euros: ¡Un total de 100.000 euros por árbol sin tener en cuenta otros beneficios adicionales!
2– Los árboles evitan o reducen la erosión del suelo y la contaminación del agua.
3– Contribuyen a las corrientes subterráneas y al mantenimiento de los ríos.
4– Las pantallas naturales hechas de árboles y arbustos, convenientemente colocadas, reducen significativamente la contaminación acústica en los cruces y vías concurridas.
5– Sirven de barrera visual.
6– Suavizan los perfiles de los edificios.
7– Las plantaciones de especies de rápido crecimiento y de rendimiento controlado son una fuente constante de combustible para estufas y chimeneas.
8– Los bosques bien gestionados son una fuente sostenible de madera.
9– Según su situación, especie, tamaño y estado, la sombra de los árboles puede reducir los gastos en aire acondicionado de edificios residenciales y comerciales entre un 15 y un 50 por ciento. Los árboles, debido a la sombra que producen y a su respiración, son un medio de “refrigeración” natural que reduce la necesidad de construir diques, centrales hidroeléctricas y nucleares.
10– Los setos plantados alrededor de las casas protegen del viento y de la nieve y pueden reducir el gasto necesario en calefacción en hasta un 30%. 11– La sombra de los árboles refresca las calles y los aparcamientos. Las ciudades son auténticas “islas de calor” que suelen registrar entre 5 y 9 grados más de temperatura que las zonas circundantes.
12– Los árboles y los arbustos de una zona residencial o comercial, bien colocados y cuidados, pueden aumentar significativamente el valor de los inmuebles.
13– Las barreras naturales contra el viento, bien situadas y cuidadas, aumentan significativamente el rendimiento de las cosechas en comparación con los campos sin protección, incluso teniendo en cuenta el espacio ocupado por los árboles. Crean un microclima más favorable para los cultivos, reducen el efecto del viento y del calor sobre las cosechas y evitan al mismo tiempo las pérdidas en la capa superior del suelo y reducen las pérdidas de humedad del mismo. Durante el invierno, retienen humedad utilizable en épocas posteriores del año, ya que los árboles acumulan nieve que, de otro modo, habría caído sobre el terreno de cultivo, las carreteras y otros accidentes topográficos.
14– Las barreras naturales plantadas alrededor de las viviendas rurales tienen muchas ventajas, como la reducción de los gastos de calefacción y refrigeración, la protección contra la nieve y el viento, el efecto estético y la creación de un nuevo hábitat para la fauna.
15– Los árboles también dan fruta, frutos secos, bayas para hacer mermeladas…
16– Los árboles que sirven de refugio para la fauna hacen que algunos animales sufran pérdidas de peso mucho menores durante los meses fríos del invierno y les proporcionan sombra para protegerse del calor del verano.
17– Las pantallas naturales contra la nieve, estratégicamente situadas, evitan que las carreteras queden cubiertas, reduciendo de esta manera los costes de mantenimiento viario y evitando los cierres de carreteras.
18– Los árboles dan belleza y armonía a cualquier comunidad. Hacen la vida más agradable, tranquila, relajada y suponen un rico legado para futuras generaciones.
19– Los bosques tropicales, además de tener un gran valor como hábitat para la fauna y como fuente de madera, tienen un valor extraordinario como materia prima para fármacos. Uno de cada cuatro productos farmacéuticos usados en el mundo desarrollado procede de una planta que crece en un bosque tropical.
20– Los árboles ofrecen numerosas oportunidades para que la gente dedique su tiempo de ocio a crear hábitats para la fauna.
21– Los árboles que crecen junto a ríos, arroyos y lagos rebajan la temperatura del agua con su sombra, evitan o reducen la erosión de las orillas y la formación de cenagales y mejoran el hábitat de los peces.
22– En otoño, llenan el paisaje de bonitos colores. Y cuando las hojas caen al suelo, si se rastrillan puede obtenerse un excelente mantillo para los parterres de flores y los jardines. ¡Además es un ejercicio estupendo!
23– Los árboles contribuyen a reducir el estrés en el lugar de trabajo y aceleran la recuperación de los pacientes hospitalizados.
24– Los árboles y el paisaje urbano pueden potenciar el civismo y contribuyen a calmar los ánimos que a veces se calientan…
25– Los árboles nos ayudan a relacionarnos con nuestro legado natural y con nuestros valores espirituales y culturales más profundos.
26– Los árboles nos sirven para recordar a las personas queridas desaparecidas y para dejar algo de valor a las generaciones futuras.
27– Una tribu de indios suramericanos cree que los árboles del bosque sostienen el cielo. Según la leyenda, la caída de los árboles aceleraría el fin del mundo.
28– Se puede plantar y cuidar árboles simplemente porque… ¡es bello verlos crecer!

La luz del futuro será más barata y ecológica

LAS LÁMPARAS LED DESTIERRAN POCO A POCO A LAS TRADICIONALES BOMBILLAS INCANDESCENTES, A LAS QUE SUPERAN EN TIEMPO DE VIDA, EFICIENCIA ENERGÉTICA, VISIBILIDAD Y POSIBILIDADES DE CONFIGURACIÓN.
La tecnología LED que se basa en un semiconductor que covierte la electricidad en luz sin necesidad de que ésta se genere a través de filamentos, no sólo es más barata y más efectiva, sino que reducirá considerablemente el gasto energético en las ciudades y, por tanto, evitará gran cantidad de contaminación en forma de dióxido de carbono.
...Las lámparas LED tienen un consumo prácticamnete nulo y ofrecen una duración muy prolongada, de unas 100.000 horas de vida, es decir unos 11 años, cuando las lámparas convencionalesgarantizan apenas unos 6 meses de funcionamiento, el equivalente aproximado a 5.000 horas de iluminación.
Una lámpara LED aprovecha casi la totalidad de la energía que consume, mientras que las bombillas incandescentes sólo transforman entre un 5 y un 10 por ciento de dicha energía en luz aprovechable, pues el resto se pierde durante el proceso en forma de calor.
(Esta tecnología, aplicada al sector del automóvil, haría que el usuario de un vehículo nunca tuviera que cambiar las luces del coche).
ESTUDIO DEL IDAE
Los datos de sostenibilidad de este nuevo sistema hablan por sí mismos. El IDAE ha realizado un estudio piloto sobre 100 semáforos regulados durante un año por lámaras LED, y concluye que el ahorro de energía sería de 54.000 kW/h, es decir, unos 4.050 € al año. Además, se produciría una disminución en el gasto propio de la reposición de material calculado en 1.200 €, que sería el precio de las 300 bombillas necesarias, a lo que habría que añadir la mano de obra empleada para esta sustitución, que costaría cerca de 7.500 €. Por tanto, al ahorro total anual serí, nada menos que 14.790 €, y todo ésto sólo en un pequeño ejemplo referido a 100 semáforos.


Suplemento DESARROLLO SOSTENIBLE
LA RAZÓN Domingo 22 de julio de 2007
LA SUSTITUCIÓN DE 45.000 SEMÁFOROS EN TODA ESPAÑA COSTARÁ 20 MILLONES DE EUROS
El IDAE dependiente del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio informó ayer que destinará 20 millones de euros para la sustitución de 45.000 semáforos convencionales por los de tecnología LED.
Con la sustitución, que se ejecutará en el plazo de un año y que afecta a un 15% de los semáforos instalados en España, se logrará un importante ahorro de electricidad, en concreto, de 48 gigavatios/hora al año, equivalente al consumo eléctrico de 12.000 hogares, y evitará la emisión a la atmósfera de casi 32.000 toneladas anuales de CO2. En España existen cerca de 300.000 semáforos cuyo consumo de energía final se estima el 350 GW/h al año, equivalente a la electricidad consumida de un conjunto de más de 150.000 hogares.
El IDAE suministrará a los ayuntamientos la tecnología gratuitamente y éstos asumirán la sustitución y el montaje. Además de un ahorro de hasta el 80% del consumo eléctrico, los nuevos semáforos incrementarán la seguridad del tráfico por su fiabilidad, durabilidad y mejor iluminación.
ABC MARTES 24-07-2007

Estamos iluminando la Tierra y "apagando" el cielo

La contaminación lumínica es un problema con veinte años cuya mayor consecuencia es que dejamos de ver las estrellas.
El 99% de los españoles vive en zonas donde el cielo nocturno no es puro, mientras en dos tercios del mundo ya no se ve la Vía Láctea cuando miramos al cielo. La culpa la tiene la contaminación por el exceso de luz, un problema con 20 años de historia que hace que en la actalidad veamos menos de 300 de las 1500 estrellas que alumbran la noche, según Carlos Herranz, presidente de la Asociación Española contra la Contaminación Lumínica (Cel Fosc). Las grandes ciudades sufren más este hecho, pero cada vez es más común también en las noches de los pueblos.
Las causas son el exceso de luz y la mala orientación de ésta
La mala orientación de las luces y el exceso de intensidad de las mismas son las dos principales causas que dificultan ver las estrellas. Los expertos dicen que toda luz que sale por encima del horizonte es inútil y en nuestro país es el 60%.





EN MALLORCA SE VE EL RESPLANDOR DE BARCELONA
El halo de luz de Barcelona es perceptible a 300 kilómetros desde la sierra mallorquina, mientras el de Madrid es de 20 kilómetros de alto y 50 de ancho, según la Cel Fo
PONEMOS EN PELIGRO LA FAUNA...Y NUESTRO BOLSILLO
La contaminación lumínica eleva el consumo de energía, genera una alteración de los hábitat naturales de los animales que les pone en peligro, sube la factura de la luz, puede generar deslumbramientos durante la conducción y además cambia los ciclos de descanso de las personas, lo que genera estrés.


VICTOR M. OSORIO
QUE VIERNES 23 DE JULIO DE 2007
La CONTAMINACIÓN LUMÍNICA está provocada por la luz artificial proyectada innecesariamente al cielo.
Según estudios del IDAE el alumbrado público en España consume 4.700 gigavatios/hora por año y es responsable de la emisión a la atmósfera de 4.250.000 toneladas anuales de CO2. La capacidad de ahorro en este sector se estima en un potencial medio de un 20%, lo que significaría reducir las emisiones en unas 850.000 toneladas de CO2 por año (más de 130 millones de euros tirados al cielo).
Estos datos hacen de España en país peor iluminado de la Unión Europea.
Cualquier luminaria que permita que un 25% o más de la luz que produce se proyecte encima de la horizontal es deficiente.
EL PAÍS lunes 19 de junio de 2006

20 julio 2007

Compromiso con el clima

En el Consejo de Ministros que hoy se celebra, dedicado de forma monográfica al cambio climático, el Gobierno de España tiene previsto aprobar 170 medidas dirigidas a combatir el cambio climático.
Aprovechando esta circunstancia, Greenpeace ha hecho públicas más de 40 propuestas urgentes que ha hecho llegar al Presidente del Gobierno encaminadas a lograr ese objetivo.

El plástico, el sudario del planeta


En España, casi el 90% de las bolsas de plástico acaba en los vertederos o como basura en el campo o la playa. Más de 100.000 ejemplares mamíferos mueren cada año en los océanos por los polímeros.

En la fabricación de una bolsa de plástico se tarda un único segundo. Sin embargo, serán necesarios entre 100 y 400 años para que se degrade, según el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP). Impacto visual, contaminación de suelos, daños a la fauna ... son sólo algunas de las consecuencias de este gasto.

En España se generan anualmente casi 100.000 toneladas de residuos de bolsas de plástico de las que, hace dos ños, tan solo se reciclaron 10.500 toneladas, casi el cien por cien de las bolsas depositadas en los contenedores. El casi 90% restante acaba fuera de los mismos pasando sus últimos días (centenares de años) en vertederos, o abandonadas en el campo, la playa o el monte.

Una

El rápido retroceso del hielo

En su tercera crónica desde el Ártico, el jefe científico del proyecto ATOS, Carlos Duarte, relata la fulgurante "huido" del frente de hileo producto del calentameinto: más de 15 kilómetros diarios.
16 de julio de 2007. A bordo del Hespérides, en el Océano Polar Ártico (80º 22´N, 12º 24´E).
Desde nuestra entrada en el Océano Polar Ártico han ocurrido muchas cosas que consignar en nuestro Cuaderno de Bitácora. La más destacada de ellas ha sido el rápido deshielo de la placa de hielo ártica. El frete de hielo, situado cerca de 81ºN sobre las islas Svalvard se mantuvo estable hasta el día 5 de julio, pero entonces comenzó a fundirse rápidamente, ayudado por el calentamiento del aire y del agua (5ºC en el aire y otros tantos en el agua). La placa de hielo ha menguado en más de 150 kilómetros en los últimos 10 días, retrocediendo más de 15 diarios.La velocidad pasmosa des deshielo se explica porque este proceso se auto-acelera en un efecto dominó: el hielo refleja el 90% de la radiación solar incidente a la atmósfera; al quedar expuesta, el agua absorbe más del 80% de la radiación, calentándose y contribuyendo a acelerar la fusión del hielo. Este rápido calentamiento del agua, junto con el aumento de la luz submarina al desaparecer la cubirta de hielo, y la descarga al mar de los nutriente (nitrógeno y fósforo) atrapados en el hielo potencian el crecimiento del plancton, que produce materia orgánica. Esta absorbe energía lumínica (particularmente la luz azul) que vuelve a emitir como calor, que contribuye al calentamiento del agua y la rápida fusión del hielo.

ABC VIERNES 20-07-2007

19 julio 2007

La mitad de los españoles respiran aire que supera los límites de protección a la salud

Bajar los humos a nuestro país. Eso es lo que pretende el estudio presentado ayer por Ecologistas en Acción sobre la calidad del aire en España.
Cataluña (209), Andalucía (90) y Madrid (82) son las regiones que rebasaron los valores saludables en más ocasiones durante 2006.
Esa mala calidad del aire que respiramos revierte en nuestra salud. Los datos que sobre los efectos para la salud maneja el Ministerio de Medio Ambiente se refieren a 16.000 muertes prematuras al año relacionadas con la contaminación atmosférica, tres veces más que las víctimas mortales de los accidentes de tráfico.
Y es precisamente el tráfico el principal responsable de esa situación. Entre 1990 y 2005 el número de turismos creció en un 69% alcanzando los 20,3 millones de unidades; mientras que el número de furgonetas creció en el mismo período un 113%. Además, entre 1997 y 2004 se multiplicó por tres el parque de vehículos diésel, que emiten 6 veces más partículas y dióxido de nitrógeno que los de gasolina. Es necesario recordar que además de la contaminación atmosférica, el coche es responsable de otros impactos medioambientales como la emisión de gases de efecto invernadero - causantes del cambio climático - y el ruido.
A pesar de esta situación, denuncian los ecologistas, la mayoría de las ciudades no tienen un plan de reducción de la contaminación para el caso en que se superen los límites.

Efectos sobre la salud


  • Dióxido de nitrógeno: Es muy reactivo y al inhalarse afecta al tracto respiratorio y tramos más profundos de los pulmones, produciendo una merma de la resistencia a las infecciones.

  • Partículas en suspensión: Las hay de 10 micras (penetran hasta las vías respiratorias bajas) y de 2,5 micras (pueden llegar hasta las zonas de intercambio de gases del pulmón).

  • Ozono troposférico: Su potente carácter oxidante hace que a elevadas concentraciones cause irritación en los ojos, superficies mucosas y pulmones.

  • Dióxido de azufre: La exposición crónica a este contaminante se ha relacionado con un mayor número de muertes prematuras asociadas a enfermedades pulmonares y cardiovasculares.


ABC JUEVES 19-07-2007

El Vaticano se apunta a la lucha para la defensa del medio ambiente

Con la instalación de paneles solares y el anuncio de que plantará un bosque en Hungría en el año 2008 para compensar las emisiones de CO2 de los cerca de 1000 habitantes de este pequeño estado, el Vaticano se apunta a la lucha para la defensa del medio ambiente. Desde su elección, Benedicto XVI se ha prodigado en llamamientos para la defensa del medio ambiente, por lo que el Vaticano sólo podía predicar con el ejemplo. De esta manera, con un territorio de medio kilómetro cuadrado, se convertirá, aunque virtualmente, en el primer Estado con emisión cero en el planeta.
LA GACETA DEL MIÉRCOLES, 18 DE JULIO DE 2007

17 julio 2007

Biodiésel para reducir la dependencia del petróleo

La Asociación Española de Operadores de Productos Petrolíferos (AOP) aboga por el uso del Biodiésel "si se quiere reducir la dependencia española del petróleo".
La apuesta del Biodiésel (se mezcla con el gasoil) en detrimento del Bioetanol (para las gasolinas) se debe a varias razones. Una de ellas es el menor contenido energético del Bioetanol, que implica un mayor consumo por distancia recorrida. Con un litro de gasolina recorremos 12 kiómetros, cuatro más que con un litro de Bioetanol, y con un litro de diésel se hancen 17 kilómetros, sólo uno más que con un litro de Biodiésel.
Asímismo, el Biodiésel de colza emite un 50% menos de CO2 que el gasóleo; el Bioetanol de cereales o remolacha sólo recorta las emisiones de las gasolinas en un 30%.
ABC LUNES 16-07-2007

A tener en cuenta



El desarrollo sostenible es aquél que satisface las necesidades actuales sin
poner en peligro la capacidad de las generaciones futuras de satisfacer sus
propias necesidades



Informe Brundtland (1987)


El mundo consume a diario 320.000 millones de kilovatios/hora, el equivalente a 22 bombillas encendidas sin parar por cada habitante del planeta.



En la Carretera

- Los Biocombustibles -Biodiesel, Bioetanol- reducen entre un 35% y un 50% las emisiones de CO2 a la atmósfera respecto a los derivados del Petróleo.




En Casa
- Se calcula que las emisiones de gases contaminantes procedentes de las casas, que en la acualidad representan un 40% del consumo total de energía, podrían reducirse un 22% hasta 2010 mejorando la eficacia energética.
- Si los viejos electrodomésticos desaparecieran de los hogares y se sustituyesen por otros de Clase A, las emisiones de CO2 en nuestro país se redudirían en más de un millón de toneladas al año.
- Gran parte de la electricidad mundial se produce en centrales térmicas de carbón, que emiten a la atmósfera dióxido de carbono, mercurio y azufre. Las bombillas de bajo consumo duran más y consumen mucho menos que las vonvencionales, lo cual recorta los costes energéticos y reduce la emisión de gases de efecto invernadero.
- Por cada bombilla incandescente que se cambiara por una bombilla de bajo consumo se ahorraría una emisión anual de 20 kilogramos de CO2 a la atmósfera.
- Según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), un aumento de dos grados de la temperatura de la refrigeración en verano permite un ahorro energético del 5% al 10% (ejemplo: sede central de la Acciona en Alcobendas (Madrid) – incremento de 2 grados durante los tres meses de verano: el ahorro se estima asciende a 72.000 kilovatios / hora y evita la emisión de 27 toneladas de CO2).
En la naturaleza

- Los árboles pueden absorber CO2 a un ritmo de 6 kilos por árbol y año.
Por cada tonelada de madera nueva que crece, se eliminan aproximadamente 1,5 toneladas de CO2 del ambiente y se producen 1,07 toneladas de oxígeno esencial para la vida


Energías renovables

- Sobre cada metro cuadrado de suelo inciden al año unos 1500 kilovatios/hora procedentes de los rayos solares, una energía que puede aprovecharse directamente o convertirse en electricidad.