Antonio Ruiz de Elvira
Aunque muchos dudan (y debieran subir al Pirineo), estamos en una carrera hacia un colapso de la civilización. Si se produce el deshielo de Groelandia, el agua del mar cubrirá la campiña sevillana y entrará en la Catedral de Sevilla. Es conveniente pararlo. La forma de hacerlo es cambiar nuestras fuentes de energía: del carbón y el petróleo a las que se conocen como “renovables”.
China, India y Brasil apoyarán Copenhague si se implantan los biocombustibles. Si se hace así, España, gracias a las hierbas que se pueden hacer crecer en las laderas hoy yermas, dejará de pagar miles de millones a los países del petróleo, porque utilizaremos nuestro propio alcohol. Las tecnologías que paran el cambio climático son españolas. Ponerlas en marcha de forma masiva generará dos millones de empleos. El miedo, como el que mete el venezolano Chávez, es para que no nos hagamos ricos y sigamos pagando, entre otros, a este señor. Bienvenida sea la iniciativa de China, India y Brasil.
Aunque muchos dudan (y debieran subir al Pirineo), estamos en una carrera hacia un colapso de la civilización. Si se produce el deshielo de Groelandia, el agua del mar cubrirá la campiña sevillana y entrará en la Catedral de Sevilla. Es conveniente pararlo. La forma de hacerlo es cambiar nuestras fuentes de energía: del carbón y el petróleo a las que se conocen como “renovables”.
China, India y Brasil apoyarán Copenhague si se implantan los biocombustibles. Si se hace así, España, gracias a las hierbas que se pueden hacer crecer en las laderas hoy yermas, dejará de pagar miles de millones a los países del petróleo, porque utilizaremos nuestro propio alcohol. Las tecnologías que paran el cambio climático son españolas. Ponerlas en marcha de forma masiva generará dos millones de empleos. El miedo, como el que mete el venezolano Chávez, es para que no nos hagamos ricos y sigamos pagando, entre otros, a este señor. Bienvenida sea la iniciativa de China, India y Brasil.
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